Durante años se enfrascaron en un choque de posiciones e ideas. Uno acusaba de populista al otro, casi siempre sin mencionar su nombre . El otro lo identificaba como el jefe de la mafia del poder.
Carlos Salinas de Gortari escribió apenas en enero de 2018 un artículo para El País en el que lanzó una serie de preguntas a los electores y algunas de ellas con aparente dedicatoria al ahora virtual presidente electo : “¿Seguirá el debate electoral anclado como desde hace 30 años al falso dilema neoliberalismo-populismo?”.
López Obrador no dudo en llamarlo “fanfarrón”.
Pero la madrugada del dos de julio, Salinas de Gortari difundió una nota para abrazar, políticamente hablando, a su archienemigo: “Andrés Manuel López Obrador ganó la elección presidencial. Felicidades por su triunfo…”.
Don Carlos aprovechó para dar la bienvenida a la reconciliación planteada por AMLO.
¿Se darán un abrazo de verdad en aras de la reconciliación del país o pura política ficción?