La participación de los votantes durante la jornada electoral de ayer en la Ciudad de México para elegir jefe de Gobierno, alcaldes y diputados se desbordó al grado de que los ciudadanos tomaron las calles para protestar por las boletas insuficientes en las casillas especiales, instaladas en distintos puntos de la capital.
Con el grito de “¡queremos votar!”, miles de ciudadanos bloquearon las avenidas Periférico y Viaducto Tlalpan; Félix Cuevas, en su cruce con Avenida Coyoacán, y las inmediaciones del Hospital General Doctor Gaudencio González Garza, ubicado en La Raza.
La inconformidad de los ciudadanos se debió a que en estas casillas sólo tuvieron paquetes de 750 papeletas y la demanda de votantes excedía las 2 mil personas.
En la casilla ubicada en la Biblioteca Vasconcelos, de la delegación Cuauhtémoc, se aglomeraron más de mil 500 personas desde las ocho de la mañana, la mayoría capitalinos que residían en delegaciones alejadas o extranjeros que pidieron su nacionalidad mexicana.
El primer bloqueo fue realizado a unos pasos del Instituto Nacional Electoral (INE), en Periférico y Viaducto Tlalpan, luego de que se anunció que las boletas se habían terminado y los presentes no podrían emitir su voto correspondiente.
En la casilla especial que se instaló de avenida Coyoacán y Félix Cuevas, a un costado del Hospital 20 de Noviembre, en la colonia del Valle, las riñas protagonizaron la jornada electoral. Por un lado, los votantes denunciaron que permanecieron formados por más de cinco horas y no alcanzaron boleta para sufragar, mientras que otros demostraron su molestia por la mala organización de los encargados, quienes les pidieron a los adultos mayores que iniciaran una fila alterna.
El tercer punto donde se reportaron manifestaciones fue en el Hospital General Doctor Gaudencio González Garza, ubicado en La Raza, tras una larga discusión de los electores con los representantes de casilla por una presunta confusión del número de boletas existentes.
En las delegaciones Iztapalapa e Iztacalco también se reportaron protestas por parte de los ciudadanos.
En Santa Cruz Meyehualco, una mujer aseguró que “estoy aquí desde las seis de la mañana, son las dos de la tarde y tengo el folio 469, pero no voy a desistir. Están aplicando el tortuguismo”; mientras que una vecina de nombre Socorro denunció que “no hubo fila para discapacitados, ancianos y embarazadas, aunque ahí tienen el letrerote, ya no alcance a votar. La encargada del INE dice que me vaya a otra casilla, pero ya perdí aquí toda la mañana, ya en ninguna voy a alcanzar”.
Reportes de incidentes. En otros hechos, la Secretaría de Seguridad Pública de la capital de la República atendió denuncias de robo de boletas y compra de votos.
La primera queja se registró en la delegación Iztapalapa, por un presidente de casilla en la colonia Santiago Acahualtepec, que fue amagado afuera de su domicilio y obligado a entregar las boletas electorales en su poder. Por este hecho, el Instituto Electoral de Ciudad de México (IECM) implementó los protocolos de seguridad e invalidó los folios de dichas boletas.
En la delegación Gustavo A. Madero, una mujer de 49 años aparentemente intentó comprar votos afuera de una casilla de la colonia Pueblo San Juan de Aragón, en la delegación Gustavo A. Madero, ya que los uniformados recibieron una queja de los votantes de la casilla 1579, quienes denunciaron que la detenida ofrecía dinero a cambio de un voto a la elección de jefe de Gobierno.
Un joven de 21 años fue aprehendido en Benito Juárez por coaccionar a los votantes a emitir el sufragio por un partido político y reclamar a otros por no votar por un candidato.
Por el mismo delito, en Azcapotzalco fueron sorprendidas tres mujeres, dos de 30 años y una de 61, quienes se presentaron en la calle Fortunato Zua Zua 90, en la colonia Pueblo de San Juan Tlihuaca.
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina informó que recibió 275 denuncias relacionadas con la jornada electoral, sin embargo, se lleva a cabo una revisión exhaustiva para decidir si se abre o no alguna carpeta de investigación; mientras que la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad no reportó ninguna queja al respecto.
