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De nueva cuenta, el equipo de campaña del candidato del PRI al Gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola, arremetió en contra de Alejandra Barrales Magdaleno, de la coalición Por la Ciudad de México al Frente, y amagó con presentar denuncias administrativas o penales por omitir declarar en su 3de3 la compra-venta de un inmueble ubicado en Calzada de la Viga.
En respuesta, Alejandra Barrales aseguró que los señalamientos en torno a sus propiedades son un “acto desesperado” por parte de su adversario del PRI, Mikel Arriola, a quien dijo, no le hará campaña.
“No voy a hacerle la campaña al último lugar en las encuestas. Todo lo que se conoce de mi patrimonio está perfectamente informado desde hace muchísimos años, soy la única candidata en este proceso que tiene una trayectoria que desde hace más de 20 años me ha hecho presentar de manera periódica mis declaraciones”, enfatizó la perredista. Además, agregó que todo lo referente a su patrimonio se ha transparentado y ha sido así desde que ocupó un cargo público.
EL UNIVERSAL informó que de acuerdo con el equipo de campaña de Arriola Peñalosa, Barrales es propietaria de un inmueble ubicado en Calzada la Viga 1155, con lo cual su patrimonio ascendería a 108.5 millones de pesos y no 96.5 millones como declaró la candidata.
A estas acusaciones, la ex presidenta nacional del PRD respondió que dicho inmueble dejó de ser de su propiedad en 2002, a lo cual ayer el equipo del priísta reviró que existen documentos con fecha de 2018 que la involucran en un embargo.
Insistió en que el inmueble dejó de ser suyo y de su familia “desde hace casi 20 años, está probado, pero además está certificado por el juez 60 de lo civil”, asentó.
Dijo que sus declaraciones patrimoniales las ha “puesto en manos del SAT, de gobiernos locales, federales, de Cámara de Diputados, del Senado de la República, que son perfectamente auditables”.
A la pregunta de si estaría dispuesta a que se le investigue por este caso, la perredista recalcó estar no sólo dispuesta, sino obligada a que se le audite.
Versión. Ayer por la tarde, Beatriz Huesca Reynoso, ex esposa del fallecido José Manuel Bonilla Mercado, informó que en 2002 su ex pareja compró el inmueble de Calzada de la Viga a la candidata Alejandra Barrales. “Este inmueble es propiedad de mis dos hijos de 11 y 14 años y de alguna manera la señora Barrales está fuera de esta situación. Estás hablando con la persona indicada y quiero dejar claro que mis hijos están de por medio”, manifestó.
Como prueba, Huesca Reynoso dio a conocer a EL UNIVERSAL una copia certificada emitida por el Juez Décimo Quinto Familiar en donde se acredita una pensión alimenticia para dos menores de edad con el bien inmueble ubicado en Calzada de la Viga 1155.
Explicó que justo durante su divorcio, José Manuel Bonilla falleció y para garantizar una pensión para sus hijos, el Juez de lo Familiar otorgó el edificio en posesión para poder usarlo y así obtener recursos.
El problema, según Beatriz, es que el edificio está invadido desde 2016 “por gente de peligro porque los hijos mayores de su ex esposo tienen un contexto difícil y se podría pensar que esta invasión es a causa de una situación de herencia”.
Aclaró que Bonilla pagó a Alejandra Barrales un millón 150 mil pesos por la casa, la cual estaba deteriorada, de ahí que fue demolida para construir los departamentos.
Refirió que los 27 millones de pesos de los que se habla fue resultado de la primera compra-venta con otras personas en 1998.
Auxiliada por una abogada, la madre de familia responsabilizó de este embrollo al extinto Jaime Bonilla, quien no formalizó el debido procedimiento de este trámite sobre la compra-venta privada ante el Registro Público de la Propiedad.
Por ello, exigió al equipo de campaña del candidato priísta una aclaración pública, pues no hubo una investigación detallada sobre este asunto y tampoco hubo respeto a los datos que se informaron.
La mañana del jueves, los coordinadores de campaña de Mikel Arriola Peñalosa, Patricio Caso y Fernando Zárate, dijeron que si Barrales se sostenía en lo dicho de que no es propietaria del inmueble en la colonia Marte estaría incurriendo en un delito que debería ser investigado y castigado por las autoridades.