politica@eluniversal.com.mx
José Antonio Meade, candidato de la coalición Todos por México, se declaró ganador del tercer y último debate presidencial.
En rueda de prensa en su casa de campaña en la Ciudad de México, donde realizó un balance de su desempeño en el encuentro entre presidenciables en Mérida, confió en que tiene tiempo para ganar la contienda electoral.
En su mensaje, Meade afirmó que hay 64 sondeos que se hicieron sobre el debate y estos acreditan que tuvo un buen resultado, que hay un consenso “prácticamente universal” de que él ganó y eso lo deja listo para enfrentar el cierre de la contienda electoral por la Presidencia de la República.
Agregó que su victoria en el debate abona a una campaña que se ha consolidado en el segundo lugar y además con amplias posibilidades de competir con éxito de aquí al 1 de julio. “El debate pone en relieve, sin ninguna ambigüedad, que vamos a ganar esta elección”, atajó.
Indicó que tiene absoluta convicción de que ganó, que hay certeza de que su campaña atraviesa por un buen momento, “no por su mejor momento, ese lo va a alcanzar el 1 de julio y uno en una campaña electoral siempre quiere que el mejor momento sea frente a las urnas”.
Meade Kuribreña dijo que ganará la elección sobre la base de ideas, propuestas y contrastes y habiendo tenido un buen ejercicio de debate, así como un buen espacio de movilización y entusiasmo de quienes integran su coalición.
“La contienda electoral en esta última etapa nos encuentra con una campaña robusta, que está funcionando bien, que genera entusiasmo, en donde, aprovechando el dinamismo del segundo y tercer debate, nos permite salir con la convicción y la confianza de que vamos a tener un buen resultado el 1 de julio”, dijo.
Meade refirió que el caso Odebrecht llamó la atención en el debate de Mérida y tiene que ver con un ángulo específico: una operación que se celebra en 2010, antes de que fuera secretario de Energía, entre Pemex y un consorcio integrado por Braskem de México, filial de Odebrecht, y por Idesa.
Enfatizó que alrededor de cualquier interrogante de ese contrato, quien está en mejor capacidad de explicarlo es el propio López Obrador o su colaborador Javier Jiménez Espriú, “que no solamente tenía cargos directivos, sino que es familiar de los principales accionistas de la empresa”, indicó.
En su exposición, Meade Kuribreña calificó como “un profundo escándalo” la forma en la que López Obrador engañó a la opinión pública en el manejo de recursos que supuestamente serían para los damnificados del terremoto del 19 de septiembre pasado y que se destinaron a operadores políticos de Morena.
“Traiciones” de Anaya. En entrevistas de radio y televisión, Meade acusó a Ricardo Anaya de dejar en el camino una historia de traiciones.
Dijo que lo acusó de ser el candidato “indiciado”, con base en la información que es pública y la denuncia que recién se presentó en su contra ante la PGR.
“Yo creo que es una imagen triste de un político, cuando se da uno cuenta que no solamente fue dejando en el camino una historia de traiciones, sino que traicionó sus propias convicciones”, dijo.