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La nueva administración federal encabezada por Andrés Manuel López Obrador deberá sentar a la mesa a 73 empresas nacionales y extranjeras para revisar los contratos petroleros que se les otorgaron en las nueve rondas de licitación llevadas a cabo en los últimos cuatros años.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) la revisión de los contratos involucra a 20 países de donde proceden las petroleras extranjeras.
El mayor número de contratos se ha concretado con empresas mexicanas, totalizando 35; además, hay nueve con firmas estadounidenses; cuatro de Reino Unido; tres colombianas; dos de Argentina, Malasia, Canadá, Países Bajos, España y China, y una de Noruega, Rusia, Alemania, Francia, Japón, Italia, Egipto, Qatar, Tailandia y Australia.
Algunas de ellas son multinacionales, como Repsol, ExxonMobil, Chevron, Total, BP, Shell, ENI, Statoil, BHP Billiton, Premier Oil Exploration and Production, Capricorn Energy, Citla Energy, Deutsche Erdoel, Hokchi Energy, Petronas, Jaguar, Sierra Oil, Renaissance, Iberoamericana, Ophir, Pan American, Strata, CNOOC, Diavaz, Ecopetrol, Inpex, Kerui, Lukoil, Newpak, PTTEP, Talos, Cheiron y Fieldwood, entre otras.
Todas estas firmas han comprometido inversiones por 160 mil millones de dólares a lo largo de la vida de los contratos, que en algunos casos llega a ser hasta de 50 años.
El órgano regulador, que encabeza Juan Carlos Zepeda, recibió con beneplácito la decisión tomada por Andrés Manuel López Obrador, virtual ganador de las elecciones de este domingo, de revisar los contratos que se han otorgado en las distintas rondas de licitación para la exploración y explotación de campos petroleros.
Señaló que en la firma de 107 contratos, que hasta ahora se han establecido
con empresas privadas petroleras nacionales e internacionales, se ha privilegiado la transparencia y la rendición de cuentas como base de su actuación en el contexto del pleno cumplimiento a su mandato legal.
Estos contratos, de acuerdo con la Secretaría de Energía, permitirán generar 900 mil empleos a lo largo de su vigencia. La CNH celebró que López Obrador haya dicho que habrá una estricta observancia de la ley en el proceso de revisión de los contratos adjudicados.
Sin embargo, en el pronunciamiento de López Obrador no queda claro si la revisión de los contratos se extenderá a las asociaciones o farmouts celebrados por Petróleos Mexicanos (Pemex).
Hasta ahora este proceso involucra a empresas como BHP Billiton, misma que resultó ganadora de la licitación de la participación de 60% del bloque Trión, en aguas profundas del golfo de México, asociación que permitió asegurar inversiones por 11 mil millones de dólares, las cuales empezaron a fluir en 2017, enfocadas en trabajos exploratorios que permitan obtener un mejor conocimiento del subsuelo.
Se estima que la primera producción inicie en el año 2023 y en 2025 la plataforma alcanzaría 120 mil barriles de petróleo crudo equivalente diarios, es decir, petróleo y gas.
También involucra a Chevron e Inpex Corporation, con quienes Pemex se asoció para desarrollar el bloque 3 Norte en aguas profundas, en el Área del Cinturón Plegado de Perdido.
Otras asociaciones de Pemex se llevan a cabo con Shell, también en el Área de Perdido, y la alcanzada con Cheiron y Deutsche Erdoel para la extracción de hidrocarburos en los campos Cárdenas-Mora y Ogarrio, ubicados en Tabasco y Veracruz.
Revisión sin suspender trabajos
Apenas el pasado viernes 22 de junio, Alberto de la Fuente, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (Amexhi), indicó que la revisión de contratos tendrá que llevarse a cabo sin suspender los trabajos que realizan las empresas, sobre todo porque el sector energético mexicano comienza a repuntar debido a su apertura.
“Es necesario que se mantenga la transparencia y el impulso que se le ha dado, gracias a la reforma energética, con la finalidad de maximizar el desarrollo y la competitividad del país”, agregó.
De la Fuente mencionó que el modelo energético del país ha modificado sustancialmente las perspectivas futuras del sector, pues existe una alta probabilidad de que en el mediano plazo aumente la producción estimada de hidrocarburos.
El dirigente empresarial explicó que de acuerdo con la Agencia Internacional de Energía, la reforma energética podría contribuir a que México aumente su producción hasta en 3.4 millones de barriles diarios para 2040.
