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El precandidato a la presidencia, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que de triunfar en las elecciones de julio, la agenda exterior “se irá al carajo”.
Llamó a no apostar tanto por el exterior y “no preocuparse tanto” por lo que diga el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, puesto que “en vez de estar apostando todo al extranjero, vamos a fortalecer la economía nacional”.
De gira por esta entidad, López Obrador detalló así su postura sobre la relación México-Estados Unidos y llamó a centrarse en lo que México puede hacer, ya que tiene mucha fortaleza, recursos naturales “y un pueblo bueno y trabajador”.
“Esta va a ser una gran nación que no se va a subordinar a ninguna otra, a ningún gobierno”, en vez de apostar al extranjero —aseguró— se rescatará al campo del abandono” para producir en territorio nacional todo lo que se consume y mejorará los salarios en ese sector.
Con estas acciones, señaló: “El mexicano no tendrá necesidad de ir a buscar una mejor vida a otras partes, el que quiera se va a ir por gusto, no por necesidad”.
Ya no se aplicará la agenda del extranjero, “se irá al carajo, porque se tendrá una agenda propia: habrá combate a la corrupción, se generarán empleos, habrá bienestar y una auténtica democracia en el país”, indicó el tabasqueño.
“Entonces, ya nadie nos va a chantajear, no nos van a estar chantajeando los gobernantes del extranjero diciéndonos: ‘te vamos a hacer un muro’, haz todos los muros que quieras, porque el mexicano ya no va a ir, no les va a convenir hacer el muro, porque necesitan al trabajador mexicano”, afirmó.
En ese escenario, como el mexicano podrá trabajar donde nació, ”cambiará la política económica, no se dependerá del extranjero”.
Así, aunque Trump defienda al mercado de su nación, México hará lo propio. Si Estados Unidos aumenta impuestos a las exportaciones de manufacturas, autopartes y vehículos mexicanos que se exportan a esa nación: “Nosotros vamos a defender a todos esos empresarios, vamos a buscar la manera de bajarle los costos”.
“No hará falta aumentar impuestos y con esto se apoyará a los empresarios” y aclaró por ello que el movimiento que encabeza es para los pobres y también para los ricos, para todos los sectores económicos, ya que participan: indígenas, campesinos, empresarios: “Hay millones de católicos, evangélicos de todas las denominaciones, libres pensadores, es un movimiento amplio, plural e incluyente”.
En su recorrido por este estado y a la pregunta de los reporteros sobre sus nexos de Vladimir Putin y si hay apoyo de Rusia a su campaña, el precandidato a la presidencia dijo: “Nada, no hay nada, ni de Venezuela, ni de Donald Trump, ni Corea del Norte, nada, nada, nada, nada”.
En cambio aseguró que esos señalamientos y los de supuestos excesos de gastos que se le hicieron se deben a que su contrincante José Antonio Meade, de PRI, Panal y PVEM, “no levanta”.
“Cuando hablan de denuncia es alharaca, es ruido, es de nerviosismo, pero la verdad, no creo que les ayude nada eso, tendrían que hacer otras cosas, un día de estos les voy a dar unos consejos para que vaya levantando Meade, yo creo que no va a levantar, ya se vio, ya se vio, no levanta, tienen que buscarle por otro lado”, dijo. Redacción
