Chalco, Méx.-Después de la tormenta no ha llegado la calma. La normalidad para los vecinos de la unidades habitacionales Pueblo Nuevo, Villas de San Martín y Los Héroes aún no parece cercana. Aunque ya no hay agua en sus hogares y continúa la limpieza en esos inmuebles y calles se sienten tristes y algunos desolados porque en un santiamén perdieron todo su patrimonio.
Mireya Cruz, quien vive en el fraccionamiento Villas de San Martín, apenas había comprado refrigerador, estufa y lavadora hace siete meses y fueron a parar al basurero hace 48 horas.
“Es muy dolorosa, lo que logra uno en años en un momento se va, ojalá que ya no nos vuelva a pasar esto. Ahora esperamos el apoyo prometido de la gobernadora (Delfina Gómez Álvarez) porque eso nos ofreció. Yo perdí todo, refrigerador, estufa, lavadoras, camas, sillones, todo perdimos, aún estamos por sacar todo lo que está adentro. No hemos dormido, cómo vamos a dormir así, contó.
La mayoría de las familias han permanecido en sus viviendas después de que se inundaron la tarde del jueves porque las aguas broncas de la parte alta de la montaña y boscosa de Chalco bajaron con mucha fuerza y se salieron del cauce de las barrancas y arrasaron con todo lo que encontraron a su paso.
“No nos podemos ir de aquí porque lo poco que tenemos nos lo pueden robar los rateros que sólo esperan que no haya gente en las casas para meterse aunque estemos en esta desgracia, entonces aquí tenemos que estar para cuidar lo que aún nos queda”, dijo Alberto López, otro de los residentes.
Aún hay lodo y sedimentos en las calles de los tres fraccionamientos ocasionados por la tormenta que para algunos habitantes de esa zona de Chalco ha sido la que más daños ha causado a la población en los últimos 20 años.
“Es la primera vez que nos pasa a nosotros, tenemos 15 años aquí y nunca había ocurrido algo así, sí se corre el riesgo porque fue de imprevisto, no llovió, el agua corrió desde los cerros porque llovió allá atrás, pero algo muy de imprevisto sí nos agarró de sorpresa a todos, esperamos que con lo que falta de la temporada de lluvias no vuelva a pasar lo mismo, a ver qué se puede hacer por parte del gobierno para que no se vuelva a desbordar este canal”, narró Carlos Ortiz, otro de los residentes.
Las autoridades locales estimaron que son 650 las familias que sufrieron algún tipo de daño en sus bienes por el desbordamiento de las barrancas Xonacatla, Sacamulas, Las Maravillas, La Monera y La Compañía.
El alcalde morenista, Miguel Gutiérrez, reconoció que el ayuntamiento no cuenta con un fondo para atender los desastres en el municipio, por lo que espera que sea el gobierno del Estado de México el que puede destinar una partida presupuestal para ayudar a las familias a recuperar parte de su patrimonio.
Por lo ocurrido se implementó el Plan DN-III y la Secretaría del Bienestar mexiquense iniciará un censo para contabilizar al número de familias afectadas por el temporal. Las labores de limpieza en las que intervienen funcionarios de los tres niveles de gobierno y voluntarios continúa.
También brigadas de salud aplican vacunas de tétanos, neumococo y hepatitis entre los vecinos para evitar que sufran alguna infección porque han estado en contacto con las aguas negras en las últimas 72 horas.
LL