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Lerma, Méx-. Casi siete años pasaron para que uno de los presuntos feminicidas de la doctora Jessica Sevilla fuera aprehendido, esta tarde se llevó a cabo la audiencia inicial, en donde se enfrentaron feministas y familiares de Javier “N”.
Javier “N”, el presunto responsable de la muerte de Jessica registrada en agosto del 2017, fue aprehendido el martes, según sus familiares, luego de varios días de acoso por parte de los policías de investigación y de manera arbitraria.
A los juzgados de Lerma, donde se lleva a cabo la audiencia, llegaron integrantes de la Batucada Feminista, además del bloque negro, para respaldar a los familiares de Jessica, quienes ingresaron a la audiencia inicial; sin embargo, también se encontraban en el lugar los familiares y amigos de Javier, quienes lo defendieron y comenzó un conato de bronca.
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Feminicidio de Jessica Sevilla
A Jessica Sevilla la reportaron como desaparecida el 4 de agosto del 2017, fue localizada el 6 de agosto y de acuerdo con su mamá, Juana Pedraza, las condiciones fueron de extrema violencia.
El cuerpo de Jessica Sevilla Pedraza, fue localizado alrededor de las 19:30 horas, en un paraje de la comunidad de El Hielo, en Huixquilucan, pese a que ella salió de su trabajo en el municipio de Xonacatlán.
La doctora fue localizada en un baldío desollado, sin un pulmón y corazón; parte del rostro quemado con ácido. “La abusaron sexualmente, le quitaron el rostro, le sacaron el corazón. Fue extrema tortura”, acusó su mamá.
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En ese entonces, la Fiscalía General de Justicia estatal atribuyó las circunstancias de su hallazgo a que los perros callejeros la habrían atacado. Jessica vio por última vez a su mamá cuando fue a comer a su casa, trabajaba en el Hospital Regional de Xonacatlán y también laboraba en un consultorio privado en la misma demarcación.
Esa tarde dijo que volvería a las 21:00 horas, pero no apareció, fue reportada como desaparecida. En la búsqueda, una compañera del Hospital Regional le dijo a los familiares de Jessica que un hombre ingresó con una herida de bala, junto con la doctora, después no se supo más sobre ella hasta que fue localizada muerta.
Al hombre que acompañaba a Jessica nunca lo citaron a declarar, de acuerdo con Juana, recibieron amenazas por parte de este señor, a quien la Fiscalía consideró una víctima, pues la primera investigación que inició la institución fue por robo, no feminicidio.
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