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Ocoyoacac, Méx.— Pobladores de este ayuntamiento irrumpieron en el Palacio Municipal y sacaron a empujones al edil Samuel Verdeja, al que bañaron con agua y refrescos y le lanzaron huevos, para protestar contra el nuevo Plan Municipal de Desarrollo Urbano, que autoriza nuevos desarrollos inmobiliarios y afecta el Bosque de Agua.
La irrupción de cientos de pobladores provocó la ruptura de cristales, voltearon sillones, sillas y lanzaron computadoras para exigir ser atendidos.
El alcalde intentó salir por una ventana, pero lo obligaron a trasladarse a la explanada, donde pobladores de los pueblos originarios manifestaron su rechazo a la actualización del plan de desarrollo.
“¡Es un ecocidio!”, “¡terminarán con los bosques y el agua!”, además de que reclamaron que en la consulta que por ley se debió organizar de forma pública y abierta, el alcalde ignoró a los pueblos originarios como Santa María de la Asunción Tepexoyuca, ejidatarios y comuneros.
Ericka Peralta Díaz, vecina de Tepexoyuca e hija de comuneros, afirmó que el nuevo plan pretende autorizar megadesarrollos inmobiliarios en el Bosque de Agua y sólo responde al interés económico de desarrolladores, sin cuidar el medio ambiente afectando los bosques y mantos acuíferos.
Para la aprobación de este plan no hubo un estudio de impacto hídrico, ni ecológico, la primera consulta fue a puerta cerrada y este 21 de noviembre, cuando esperaban hacer lo mismo con la segunda consulta pública, los pobladores irrumpieron en el Palacio Municipal.
El nuevo ordenamiento contemplaba el crecimiento de Ocoyoacac con cerca de 200 mil habitantes para 2050, sacrificando el bosque, cuando hoy hay 72 mil pobladores, indicó Peralta.
