Teotihuacán, Méx.-El primer lugar que muchos decidieron visitar este 1 de enero fue la Zona Arqueológica de Teotihuacán, algunos para llenarse de energía y otros para pedir a los dioses de esa ciudad antigua que sea un buen año para el mundo.
Decenas de personas madrugaron porque tenían que llegar tiempo para realizar un sobre vuelo en globo aerostático, el cual reservaron desde días antes.
El cielo del Valle de Teotihuacán fue surcado por las aeronaves de distintas empresas privadas que ofrecen ese servicio a los visitantes nacionales y extranjeros.
Esa actividad poco a poco se recupera luego del accidente ocurrido en abril pasado cuando uno de globos aerostáticos se desplomó con cuatro personas a bordo, dos de la cuales perdieron la vida y las otras dos resultaron heridas, entre ellos el operador de la aeronave.
La mayoría de los turistas locales e internacionales esperaron a que fueron abiertas las puertas del recinto prehispánico para ingresar, unos por primera vez y otros para admirar de nueva cuenta las pirámides y los vestigios históricos que ahí se encuentran.
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La Calzada de Los Muertos fue copada por los cientos de turistas que caminaron de un lado a otro para apreciar los edificios prehispánicos que se encuentran en la segunda zona arqueológica más visitada del mundo, sólo después de la de Egipto.
Algunos de los asistentes efectuaron rituales frente a la Pirámide del Sol y a la Pirámide de La Luna, principalmente, como suele ocurrir durante el equinoccio o solsticio.
“Venimos hoy para renovar energía, cerrar un año e iniciar otro con una experiencia por primera vez hace que se renueve la energía y ese es el motivo. Aquí se respira otro tipo de aire y es para iniciar el año diferente”, dijo Victor, un turista proveniente del estado de Jalisco.
“Es venir a recargarse de energía e iniciar el año con todo lo que se venga y a echarle ganas. Y está muy bonito la verdad”, contó María Guadalupe, otro vístante de esa entidad.
“Estamos de visita y disfrutando este primer día del año, está lindo saber que puedes venir a un lugar histórico tan importante de nuestro país cualquier día del año y nos pareció bonito empezar el año disfrutando de nuestra cultura. Vengo con unos familiares que vienen de Alemania”, narro Gisel, otra de las asistentes.
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Otros asistentes adquirieron amuletos o piezas de cuarzo y obsidiana porque las consideran como receptores de buena vibra y rechazan las malas vibras que pudieran afectarlos.
El primer día del año la Zona Arqueológica de Teotihuacán estuvo muy concurrida, incluidos los restaurantes donde se ofrecen platillos típicos de esa región del Estado de México, lo que ayuda a reactivar la economía regional.
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