A dos meses del feminicidio de la joven Ana María, su madre Ximena Céspedes reflexionó sobre las diferencias entre los familiares de una víctima y los del presunto feminicida como quien terminó con la vida de su hija.
En un video con la leyenda #JusticiaParaAnaMaría, Céspedes sostuvo que "el dolor es absolutamente indescriptible, duele el alma"; sin embargo, asegura que no se imagina lo que sienten los familiares del presunto feminicida: "tiene que ser un infierno".
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"Pero el infierno es diferente porque ellos todavía lo pueden ver, pueden visitarlo, lo pueden abrazar, pueden llorar con él, incluso pueden enojarse con él porque saben que él les va a contestar", narró en su video.
Asimismo, agregó que sus padres aún "le pueden llevar su comida favorita, un buen libro, una cobija para que no tenga frío, tendrán que cargar eso sí, con ser los padres de un presunto feminicida.
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Sin embargo, sobre su hija, dijo: "nosotros la creamos para que fuera una persona independiente segura de sí misma pero sobre todo buena persona y lo fue hasta el último momento de su vida".
"Le ruego a los padres de los presuntos feminicidas que sean parte de la solución y no sean parte del problema, que no lo traten de justificar, que no lo ayuden a escapar", pidió a los familiares de Allan N y de otras personas implicadas en casos similares.
La joven Ana María de 18 años llevaba 2 meses en la carrera de Medicina, murió víctima de feminicidio al interior de su casa en Atizapán, Estado de México, donde su expareja ingresó y la atacó e intentó que el caso fuera investigado como suicidio para evadir la responsabilidad, así lo dio a conocer Ximena Cespedes el pasado 12 de septiembre.
Allan “N” se encuentra detenido por el feminicidio de la joven, Ximena declaró que continuaba con miedo por su propia seguridad y la de su familia.
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