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Ni el ayuntamiento de Texcoco, ni el de Acolman, ni el gobierno del Estado de México, ayudaron a Cristian, un joven de 18 años que fue rociado con gasolina el fin de semana pasado y sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en sus piernas y genitales, para trasladarlo a un hospital público.
Su familia tuvo que deambular durante varias horas para que finalmente fuera admitido en el Hospital Rubén Leñero de la Ciudad de México, donde recibirá atención médica.
Póliza de gastos médicos no cubrían el monto total
René, padre de Cristian, contó que la póliza de gastos médicos de la Escuela Mecánica, Diésel y Gasolina, perteneciente al grupo Cedva, ubicadas en Texcoco, donde sufrió la agresión de parte de sus compañeros de clase, cubría 50 mil pesos, pero se llegó a esa suma y ya no tenían ellos con que pagar su hospitalización.
La idea que tenían era llevarlo al Hospital General de Las Américas, ubicado en Ecatepec, en una ambulancia, pero nadie los apoyó y en un vehículo compacto de la familia hicieron el viaje, con todo y suero para hidratarlo.
Cuando arribaron al inmueble perteneciente al Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), les dijeron que no había lugar para atenderlo y tenían que buscar otro centro médico para llevarlo.
Mientras Cristian esperaba en el interior del automóvil, sufría por los dolores que le causaron las quemaduras y sin que alguno de los médicos de ese sitio lo revisara. Por el esfuerzo, el muchacho sangraba de las piernas, ante la desesperación e impotencia de su padre.
Reporteros de una empresa televisiva consiguieron un lugar en el Hospital Rubén Leñero para que allá fuera atendido.
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De Ecatepec se fueron de nueva cuenta en su vehículo compacto hasta el inmueble de la alcaldía capitalina Miguel Hidalgo.
Mientras iban en el trayecto, los interceptó una ambulancia de Protección Civil de la Ciudad de México y lo subieron a la unidad para llevarlo al centro médico, donde fue recibido por personal médico.
El padre de Cristian denunció la deshumanización de las autoridades de los tres niveles de gobierno, porque ni los ayuntamientos de Texcoco, donde ocurrieron los hechos, ni el de Acolman, donde residen, ni el gobierno del Estado de México, ni el federal, los ayudaron en esta situación que enfrentan.
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Así fue el ataque contra el joven Cristian
El sábado pasado, Cristian fue agredido por dos de sus compañeros de clase en la escuela de mecánica a la que asistía para aprender a reparar motocicletas.
Le rociaron gasolina en las piernas y con un encendedor le prendieron fuego, por lo que se le quemaron las piernas y sus genitales. Fue llevado a una clínica privada en Texcoco y al no poder pagar su internamiento su familia decidió llevarlo a otra institución pública.
Los dos presuntos responsables de la agresión no han sido detenidos.
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