Naucalpan, Méx.— Un equipo de geólogos e ingenieros civiles del Departamento de Riesgos de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, de la UNAM, recorrieron calles, cuevas y barrancas de Praderas de San Mateo para indagar el origen de los estruendos que habitantes han sentido desde el mes pasado.
Los colonos reportaron que sienten vibraciones y estruendos, en ocasiones hasta siete veces en un día, como ocurrió desde la madrugada del 10 de agosto, por lo que exigieron la presencia de autoridades federales, estatales y municipales de Protección Civil.
Sergio Mancilla Zayas, director general de Gobierno de Naucalpan, informó que la alcaldesa Angélica Moya Marín pidió incorporar a especialistas para abordar este problema.
Este jueves, el grupo de especialistas en ingeniería tanto civil, geología y geotécnica, mecánica de suelos, vulcanismo y sismología, geohidrología y en riesgos recorrieron Praderas de San Mateo, como el punto más cercano al epicentro del sismo de 2.2 grados que se registró el 19 de julio.
Los investigadores de la UNAM, acompañados de personal de Protección Civil, autoridades de Naucalpan y habitantes de la zona, como Daniel Valderrábano Pérez y Ernestina Hernández García, delegada de Praderas de San Mateo, recorrieron además cuevas y los puntos donde vecinos reportaron que se ha sentido con mayor intensidad las sacudidas y vibraciones.
De forma preliminar, los investigadores señalaron que las causas de estas vibraciones podrían ser movimientos geológicos, que la comunidad esté asentada sobre zona de cavernas y hasta filtraciones por alguna fuga de agua, lo cual se determinará luego del estudio geológico de la zona con el uso de un georadar.
“Lo que tenemos que hacer es geofísica. Vamos a pasar aparatos por la superficie para lanzar ondas en el subsuelo y detectar qué es lo que hay allá abajo y qué es lo que está sucediendo, qué tipos de materiales o si hay huecos. Ya determinando esto veremos qué es lo que sucede”, señaló el geólogo José María Chávez Aguirre.
Los especialistas coincidieron en que, de acuerdo con los indicios recabados durante el recorrido, no existe riesgo inminente para la población; sin embargo, se continuará con los trabajos para establecer el origen de los sonidos.
Carlos Sánchez, director regional de la Coordinación General de Protección Civil y Gestión Integral del Riesgos del gobierno estatal, explicó que no existen indicios de que los estruendos sean provocados por el uso de explosivos en obras efectuadas en la región.