Tultepec, Méx.— Un sistema de monitoreo de temperatura y humedad a través de plataformas digitales es desarrollado por alumnos de tercero y quinto semestre del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de México (CECYTEM), para ayudar a los artesanos pirotécnicos a detectar peligros y cuidar sus vidas.
El profesor y asesor del proyecto, Jesús Alberto Ramírez Bañuelos, explicó que el Instituto Mexiquense de la Pirotecnia ya tiene conocimiento de la iniciativa estudiantil y ya estuvieron en mesa de trabajo con el Grupo Pirotécnico Bicentenario de La Saucera, interesado en llevarlo a fase de prueba en la zona permitida por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para la fabricación de artificios pirotécnicos.
Los alumnos desarrollaron el algoritmo para monitorear la temperatura y tener vista gráfica de la geolocalización de los talleres, puntos de venta y mercados de pirotecnia de la región a fin de que, en caso de detectar cambios en la temperatura, se emitan alertas de peligro y pasen a la implementación de protocolos de auxilio y viales, ya que estarían directamente conectados a protección civil y policía municipal, mostrándoles la mejor ruta de llegada al punto de emergencia.
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“No queremos modificar esa cultura de la pirotecnia, sino que la tecnología conviva con lo artesanal. Que apoye a que disminuyan accidentes y se cuiden las vidas humanas”, dijo Marco Antonio Velasco González, estudiante del quinto semestre.
El sistema de monitoreo será riguroso, es decir, no estará disponible en tiendas digitales como PlayStore o AppStore, sino que se instalará directamente a los celulares de los artesanos de la pólvora por medio una APK y está conformado de una aplicación web llamada Tlacontzontli, aplicación móvil denominada Omentecutli y un instrumento físico bautizado como Tonatiuh; inspirándose en la cultura mexica.
En el mapa se podrá visualizar la ubicación del taller, su temperatura y humedad y con un sistema de semaforizacion indicará si hay peligro, basándose en los colores verde, amarillo y rojo, según el grado de peligro, si llegara a existir y calibrado de manera particular en cada polvorín, ya que no todos manejan los mismos materiales. En caso de emergencia se enviarán mensajes vía WhatsApp a los artesanos para que puedan evacuar.
“A Tultepec se le cataloga como la capital de la pirotecnia y 65% de la población se basa en esto. Por todo lo que abarca, qué mejor que apoyar en esta actividad”, dijo el alumno Daniel Robles Santos, al tiempo de explicar que con este proyecto ya fueron campeones del concurso estatal Emprendedual del Estado de México en la categoría de innovación social; y el primer lugar en un concurso de Huawei y fundación Somos el Cambio, en la categoría “somos el cambio joven”.
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Todo el desarrollo de su idea ha llevado poco más de un año y medio de trabajo y el hecho de poderlo ver ya plasmado y próximamente en la fase de protocolos y atlas de riesgos, les motiva a seguir.
Con el resultado que tengan con Tlacontzontli, Omentecutli y Tonatiuh piensan que también pueden dejar una huella respecto a que los pirotécnicos conozcan que es posible que la tecnología conviva con lo artesanal, dijo Marco Antonio Velasco.
“Enriquecer la cultura, evitar riesgos y cuidar vidas”, son algunas de las máximas con las que han trabajado, precisó la alumna de quinto semestre Jimena Frausto Delgado.
