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Una playa secreta y otros lugares naturales que debes conocer en Michoacán

Siete lugares en el estado que debes visitar al menos una vez en la vida: un mar de lava petrificada, una playa escondida, un resort de lujo con aguas termales en medio de un bosque y otras maravillas más

Playa del Amor, en la costa de Michoacán. Foto: Adriana Hernández
15/01/2020 |00:00Staff |
Redacción El Universal
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El estado de es cuna de grandes maestros artesanos, excelsas s y también de increíbles atractivos creados por la naturaleza que todo mexicano debe visitar al menos una vez en la vida. Descubre siete de ellos

1.    La isla de Petatán

Entre noviembre y abril llegan grandes parvadas de a la Isla de Petatán, en el lago de Chapala, procedentes de Estados Unidos y Canadá. Alrededor de 20 mil ejemplares se refugian de las bajas temperaturas. Además del clima cálido, aquí encuentran mojarras y carpas, un delicioso alimento para saciar su hambre. Se dice que la mejor hora del avistamiento es por la tarde.

La isla de Petatán se localiza en el municipio de Cojumatlán de Regules, a menos de dos horas de Zamora.

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2.    La alberca de Tacámbaro

Este lago inunda el cráter de un volcán en el Pueblo Mágico de Tacámbaro. Según estudios de la UNAM, el lago tiene una profundidad aproximada de 28 metros y un diámetro de 750 metros.

Aquí se permite acampar, hacer un día de campo, incluso nadar en el lago, aunque bajo tu propio riesgo. Los lugareños ofrecen sus servicios para contarte alguna que otra leyenda de este volcán extinto.

3.    Playa Arenas Blancas

En la espectacular costa de Michoacán, esta playa apenas mide tres kilómetros de largo. Solo cuenta con una enramada cuyos dueños te llevan al paraíso: la Playa del Amor, una caleta protegida por riscos con un mar de agua color esmeralda que, con el vaivén de las olas, penetra las cuevas formadas entre los riscos. Para llegar hay ella hay que hacerlo pataleando, con medio cuerpo sobre una tabla de buggy y en compañía del guía.

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4.    Paricutín

Camina en un mar de lava petrificada. Debajo de ella quedó enterrado el pueblo de San Juan Parangaricutiro. De este, solo quedan los vestigios de su templo en la superficie. La tragedia ocurrió el 20 de febrero de 1943, cuando nació el Paricutín, el volcán más joven del mundo. De este coloso a los restos de aquella iglesia, se llega en unos 30 minutos a caballo. Niños y adultos se ofrecen a guiarte en este extraordinario paisaje tan surrealista y a contarte la historia de aquel día.

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5. Los Azufres

El Parque Nacional Los Azufres es un paraje en la montaña que atrae a los turistas por sus reconfortantes y sanadoras aguas termales. En estos bosques es fácil encontrar actividades ecoturísticas y de aventura, así como balnearios para disfrutar de los beneficios de sus lodos, albercas y pozas naturales de agua calientita que emana vapor, capaz de relajarte totalmente y hasta de quitarte uno que otro achaque. Para una escapada romántica, sugerimos un fin de semana en Quinta los Azufres, con cabañas de lujo, alberca techada y climatizada y servicios de masajes y terapias. Cuenta con su propio restaurante.

6.    Zirahuén

A orillas del lago de Zirahuén , se estableció el Zirahuén Forest & Resort, un parque de aventura con cómodas y bonitas cabañas en medio del bosque para aquellos viajeros que buscan descansar de su ajetreada rutina. El resort organiza actividades ecoturísticas y de aventura para visitantes intrépidos. De hecho, lo más aclamado de aquí es su circuito de tirolesas instaladas a diferentes alturas y con distintas longitudes, con puentes colgantes. Hay gotcha y renta de bicis de montaña, cuatrimotos, lanchas y kayaks.

Si no tienes ganas de cocinar en tu cabaña, el resort te consiente en sus dos restaurantes.

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7.    Cascadas de Ichaqueo

Es un centro ecoturístico en medio de un bosque, a corta distancia de Morelia. El sitio es apto para viajeros que aman caminar, explorar y retarse a sí mismos con alguna actividad de aventura llena de emoción como el cañonismo. Si lo tuyo no es internarte en un cañón, saltar cascadas, caminar entre rocas y nadar río abajo en medio de dos paredes verticales de roca natural, no te desanimes a conocer Ichaqueo, pues también se organizan caminatas ligeras para admirar algunas cascadas como la del Salto, de 40 metros de altura (la caminatas es de 40 minutos, aproximadamente). Los lugareños ofrecen, además, cabalgatas, descensos a rappel, bici de montaña y escalada. Es posible pasar la noche en este lugar, ya sea en una cabaña de ladrillo o en una tienda de campaña.

Si te interesa la primera actividad, entonces busca a la touroperadora Ecokarani.

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