Seguramente has leído los nombres de algunos aviones miles de veces pero, ¿tienes idea por qué reciben esa denominación? ¿Por qué siempre comienzan con un número?
De hecho, si pones un poco de atención notarás que los modelos de Boeing siempre parecen comenzar con un número 7, y los que pertenecen a la empresa Airbus, empiezan en 3.
El número mágico de Boeing
Antes de enfocarse en la aviación comercial, la compañía Boeing produjo aviones militares y misiles, explica el sitio Traveller . Cuando se introdujo en el transporte de pasajeros, reclasificó sus aeronaves usando categorías identificadas por cifras de tres dígitos: 300 o 400 para aviones propulsados por hélice, 500 para los de turbinas, 600 para cohetes y 700 para aviones de reacción, empleados de manera comercial.
Sin embargo, el primer avión comercial de Boeing se llamó 707. La razón: el departamento de mercadotecnia decidió que simplemente esa cifra “sonaba mejor” que 700. A partir de ese momento, todos los modelos de la empresa empiezan y terminan con un número 7, como una especie de amuleto.
Cada uno de los aviones que han surgido desde entonces tiene subcategorías. En su nombre puede haber dígitos adicionales o letras, pero siempre se respeta la regla del 7. Por ejemplo, el 707 tuvo modelos conocidos como 707-120 o 707-138.
La combinación de Airbus
En el caso de esta empresa, todo es un poco más sencillo. Todos los nombres de sus aeronaves comienzan con la letra A y casi siempre le sigue un número de tres dígitos, el cual comienza con 3.
El avión Airbus original se llamó A300, por su inicial y porque fue diseñado para transportar 300 pasajeros. En los modelos posteriores, la compañía le suma un 10 a la cifra: está el A310 o el A320. Únicamente existe una brecha mayor, entre el A350 y el A380, para destacar el enorme tamaño de este último.
Por último, Airbus agrega variantes a sus modelos. Por ejemplo, el A321 es más grande que el A320.