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En los últimos 20 años, Bangkok ha evolucionado rápidamente y, hoy en día, se encuentra en su apogeo con una economía estable y en crecimiento, y un turismo que repunta. Es la capital y la ciudad más grande de Tailandia (con 9.7 millones de habitantes) y se asemeja a una licuadora cultural donde todo se mezcla: los rascacielos y otros edificios modernos, con los templos antiguos, los budas dorados y los mercados flotantes; las tradiciones, con la afición por el deporte de contacto (como el box y el muay thai) y la vibrante vida nocturna.
Bangkok
se descubre de varias maneras y se puede adaptar a gustos y presupuestos. Por eso, aquí te compartimos dos planes de viaje : el primero, con lugares económicos para el que gusta de los recorridos histórico-culturales y de exploración y, el segundo, con los lujos y todo el confort que esta capital puede ofrecer a los viajeros bon vivant.
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Para el viajero que busca ahorrar
En medio del caos vehicular de Bangkok , sus 428 templos son el contrapunto y uno de los tesoros más preciado de la ciudad, además, sus costos de entrada son accesibles para los visitantes: entre 20 y 500 bahts (entre 12 y 318 pesos, más o menos).
La religión dominante de Tailandia es el budismo, por lo que resulta muy común encontrarse con monjes vestidos de naranja y budas de mármol y piedra por doquier. El tipo de budismo es el Theravada, que hace hincapié en el potencial del individuo para alcanzar el nirvana sin la ayuda de santos o gurús.
Durante tu estancia en Bangkok , no puedes dejar de ir al Wat Traimit o Templo del Buda de Oro . El pequeño santuario está custodiado por una enorme estatua de oro macizo de cinco toneladas de peso. Otro lugar que seguramente te va a gustar, es el Wat Pho o Templo del Buda Reclinado. El “Iluminado” de 45 metros de longitud luce sereno, recostado de un lado y con la cabeza recargada sobre su mano.
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Wat Phra Kaew
o Templo del Buda de Esmeralda —que forma parte del complejo del Gran Palacio — es uno de los más importantes de Tailandia. Este Buda apenas mide unos 45 centímetros, pero tiene un gran valor histórico, artístico y espiritual. Es de jade y fue decorado en oro y piedras preciosas. Se dice que proviene de India; que fue elaborado en el año 43 a.C.; que viajó por varios países del sureste asiático; y que Camboya, Laos y Vietnam se apropian su origen.
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La visita a este último es bastante económica. Aquí, aprovecha para recorrer el Gran Palacio . Sus entradas están vigiladas por guerreros o demonios de cinco metros de altura que sirven como guardianes de tesoros. El Gran Palacio es un museo al aire libre que exhibe pintura, bellos jardines, estupas, torres y otros edificios que nos parecen exóticos. Los acabados en oro brillan en cada rincón. Los aromas del incienso y de las flores de loto se mezclan en el ambiente.
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Algunas áreas de este complejo cierran en fin de semana, así que lo mejor es programar tu visita entre semana.
En el mundo de lo físico y terrenal tienes que presenciar una pelea de muay-thai (parecido al kickboxing) en la arena Lumpinee . Te platico la escena: un luchador recorre cada una de las esquinas del ring, mientras las vibraciones emanadas por los tambores klong kaen retumban en las paredes del estadio. El pugilista se dirige al extremo donde su maestro recita unas plegarias en posición de saludo. El boxeador está preparado en cuerpo y alma para afrontar el combate. El árbitro reúne a los luchadores en el centro del cuadrilátero y con música típica de fondo comienza el enfrentamiento. ¡Fight!...
Para comer y beber bueno-bonito-barato, nada como acudir al Chatuchak Weekend Market , donde encontrarás platillos tailandeses que se antojan con solo percibir su aroma, ya que entre sus ingredientes destaca el uso de frutos secos, leche de coco, curry y jengibre, en combinación con arroz, soya, carne de cerdo, pollo y mariscos.
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Hablamos del clásico mercado donde puedes comer en los locales a excelentes precios.
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Si el presupuesto que tienes te permite hacer compras, te recomiendo el Suan Lum Night Bazaar, con lo último en implementos para tu Xbox, hasta gangas de ensueño, principalmente en equipos electrónicos, ropa y accesorios. Por ejemplo, una bolsa elaborada a mano con motivos típicos puede costar unos 150 bahts (95 pesos).
El sistema de transporte público es barato y muy variado: desde el innovador Sky Train, un sistema elevado de Metro que circula por toda la ciudad, los clásicos tuk-tuk (mototaxis modificados) y las barcas con motor para transportarse por la red fluvial, además de una red muy eficiente de autobuses.
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Viajero sin límites (de presupuesto)
Las tentaciones por vestir y lucir bien se ven respaldadas por las marcas más prestigiadas del mundo en esta ciudad donde se desatan pasiones cosmopolitas por la moda. Las indispensables, como siempre, serán las boutiques de Central World Plaza y Siam Paragon Mall , ambos en el distrito de Pathum Wan.
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Si te atraen los objetos de decoración, en esta metrópolis verás de todo. No dejes de visitar la tienda Q Concept store (dentro de Siam Paragon Mall ), con su propuesta de muebles y artículos de diseño que incorpora elementos de la cultura tailandesa y de la moda pop.
Cuando visites la casa-museo Jim Thompson , entra a su tienda de ropa y antigüedades. Aquí, una camisa de seda de diseñador la puedes encontrar en cinco mil 300 bahts (aproximadamente, dos mil 300 pesos). Este complejo lo integran cinco casitas estilo tailandés. Bien vale admirar su arquitectura y su exposición de arte asiático.
Para una velada romántica, reserva una mesa en el Restaurante Vertigo , en el piso 61 del Hotel Banyan Tree, con una panorámica de la ciudad a 200 metros de altura. Prueba el salmón empapelado con romero y las viandas a la plancha, con mantequilla de avellanas y queso parmesano. De ahí, sube por un exótico cóctel al súper fotografiado Moon Bar, catalogado como uno de los 10 mejores bares de azotea en el mundo.
Foto: Cortesía Banyan Tree Hotels & Resorts
Otra opción nocturna es tomar el crucero de lujo Shangri-La Horizon, que te llevará en un recorrido de dos horas a lo largo del río Chao Phraya, mientras gozas de una cena de lujo.
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Si te gusta más la comida típica regional, la opción es visitar el Restaurante Celadon , del Hotel Sukhothai . Pide el miang kam: combinación de langostinos ahumados, curry vegetariano con berenjena y cangrejo con salsa picante.
Cuando la atmósfera o ambiente del lugar son importantes para el viajero, un lugar muy cool que debes conocer es el restaurante Cy’an, del Hotel Metropolitan . Se especializa en cocina mediterránea en un espacio con mobiliario de diseño, iluminación tenue y música lounge. Bangkok en definitiva es el nuevo jardín de las delicias.
Para finalizar una velada de lujo y regocijo, te recomiendo ir a ver Siam Niramit, un espectáculo teatral de baile y música con más 150 artistas que recrean pasajes históricos y culturales de Tailandia. En el escenario llegan a usarse hasta 500 atuendos diferentes. En este auditorio al aire libre (con más de dos mil plazas) el show es una alegoría del clásico teatro chino, pero con una tecnología y una calidad artística descomunal. Una vez terminada la función podrás visitar réplicas de villas tailandesas y conocer cómo es su vida cotidiana.
¿Por qué Bangkok tiene más de 12 millones de visitantes al año? Quizá se deba a otros valores agregados que aman los turistas: 1. en esta ciudad se devuelven los impuestos de las compras; 2. puedes regatear en todos lados; y 3. es totalmente LGTTB friendly.
Dónde hospedarse. Económico: Sukhothai Hotel ; de lujo: Grand Hyatt .
Te recomendamos reservar al menos un día para visitar estos lugares fuera de Bangkok que, por su importancia histórico-cultural, son básicos.
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Embajada de Tailandia en México: Avenida Paseo de las Palmas 1610, Lomas de Chapultepec, CDMX. www.thailatinamerica.net
Oficina de Turismo internacional: www.tourismthailand.org/home
Tipo de cambio10 bahts equivalen a 6.37 pesos mexicanos.
La mejor época para visitar Bangkok es de octubre a enero ya que baja la intensidad de calor. Las lluvias ocurren en el verano y terminan en septiembre, por lo que ya es buen momento para preparar tu viaje a esta capital.
Los mexicanos necesitan un visado para visitar este país asiático y puede conseguirse en la Embajada de Tailandia en Ciudad de México.
No todos hablan inglés en Bangkok y mucho menos español. Es recomendable conseguir un guía que te pueda traducir del tailandés.
Es común que, al ir por la calle, te ofrezcan masajes, pero no todos son confiables y tampoco todos son masajes. Si quieres disfrutar de un auténtico masaje tailandés, pregunta al concierge de tu hotel.
Cuando visites los templos debes quitarte el calzado y no llevar puestas prendas escotadas que dejen al descubierto hombros ni piernas (como faldas, shorts o blusas de tirantes).
Porta un distintivo que indique en tailandés el nombre de tu hotel y la lengua que hablas a la hora de vivir la noche en la ciudad de Bangkok .
