es un gran santuarios de aves migratorias , de ballenas y tortugas marinas. Michoacán es uno de los lugares elegidos por estas últimas, y lo mismo sucede con el gran viaje de las mariposas monarcas a tierra purépecha. Pero, ¿sabías de la existencia de las grandes comunidades de pelícanos borregones que cada año llegan también al estado? Te contamos un poco de ésta...
Los pelícanos borregones viajan desde el sur de Canadá hasta el lago de Chapala que comparten los estados de Michoacán y Jalisco. Muchos de ellos, incluso, se siguen de largo y llegan hasta Guatemala.
Foto: Cortesía Sectur Michoacán
El nombre oficial de la especie es pelícano americano ( Pelecanus erythrorhynchos ).
Esta especie, tranquila y simpática, es muy grande: puede alcanzar tres metros de envergadura, mientras que de pico a cola mide hasta 1.75 metros de largo, y pesa hasta 7 kilos.
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Los pelícanos borregones permanecen en nuestro territorio de noviembre a abril . Aunque ya están a punto de partir, aún quedan cientos de ellos.
En el lago se han podido avistar diferentes colonias que, juntas, concentran hasta 20 mil ejemplares en una sola temporada.
Foto: Cortesía Sectur Michoacán
Se establecen temporalmente en la Ciénaga de Chapala , en el municipio de Cojumatlán de Régules, del lado michoacano, una región con tradiciones purépechas muy arraigadas. Aquí es donde está la Isla de Petatán , un pueblo de pescadores que, gracias a su oficio, atraen a las aves para alimentarlas de los restos que de su pesca.
Ellos cariñosamente les llaman “pelícanos borregos” por su tupido plumaje blanco.
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Los pelícanos se reúnen al atardecer por lo que, ante el sol del crepúsculo, forman un espectáculo natural único.
Foto: Cortesía Sectur Michoacán
Los picos y patas de las hembras son amarillos y de los machos, naranjas. Las hembras ponen hasta tres huevos por temporada. Ambos padres se encargan de la incubación.
Esperemos volver a viajar muy pronto, y ver este fenómeno con nuestros propios ojos a partir de noviembre de este año.