¿Te has preguntado cuánto puede contaminar el avión en el que viajas, o las operaciones aéreas durante un año? Los siguientes 12 datos te darán una idea de los efectos de la industria de la aviación en el medio ambiente.
Las emisiones de gases de efecto invernadero (el dióxido de carbono, o CO2, principalmente) son uno de los factores que produce el calentamiento global. De acuerdo con la Organización de Aviación Civil Internacional, la aviación contribuye en 2% a las emisiones de efecto invernadero a nivel mundial. Es una de las mayores preocupaciones ambientales de la industria.
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En 2020, las emisiones producidas por la aviación serán 70% mayores que en 2005. Para 2050, podría incrementarse entre 300 y 700%.
Una persona que aborda un vuelo redondo entre Londres y Nueva York genera el mismo nivel de emisiones que un calentador casero utilizado por un año entero, según la Comisión Europea.
En 2017, los aviones produjeron 859 millones de toneladas de CO2, asegura Air Transport Action Group.
De acuerdo con el sitio web Grist.org, un recorrido de 483 kilómetros a bordo de un coche mediano puede emitir aproximadamente 104 kilos de dióxido de carbono, sin importar el número de pasajeros. Volar esa misma distancia genera 184 kilos, por pasajero.
La industria de la aviación es responsable del 12% de dióxido de carbono emitido por medios de transporte. Los medios terrestres producen el 74%.
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En 2016, la Organización de Aviación Civil Internacional aprobó una resolución para estabilizar y reducir las emisiones de carbono a nivel global. Se llama Esquema de Reducción y Eliminación de Carbono de la Aviación Internacional. En una fase piloto del programa, participarán 60 países a partir de 2021.
En este sitio web puedes calcular la contaminación que producen tus viajes. Por ejemplo, si vuelas desde la CDMX hacia Nueva York, se emiten 491 kilos de CO2 por pasajero.
Actualmente, las operaciones aéreas son 70% más eficientes que en los años 70.
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Las operaciones que se llevan a cabo en aeropuertos (despegues, aterrizajes o servicios en tierra) también generan contaminación en sus alrededores. Esto resulta preocupante porque cerca de muchos aeropuertos han aumentado los desarrollos residenciales.
Este tipo de contaminación depende de distintos factores, como el tamaño del aeropuerto, el uso de los terrenos que lo rodean y el clima local.
Entre los contaminantes que se emiten durante las operaciones aéreas se encuentran: óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono, óxidos de azufre, hidrocarburos sin quemar y ozono.