A menos de una hora del pueblo mágico de Tulum, inmersas en la espesa selva maya, se levantan las casas del árbol de Ikalar Tulum, un hospedaje de arquitectura orgánica que ofrece una experiencia increíble entre las copas de los árboles.
Te proponemos una escapada a este idílico espacio que, además, ofrece restaurante y varias actividades.
Ikalar Tulum abrió en 2021. La construcción de este espacio fue todo un reto arquitectónico, ya que se debía desplantar la menor superficie posible y respetar los árboles que existían en el lugar.
La arquitectura es de estilo orgánico, una “obra de arte habitable rodeada de jardines y espejos de agua enmarcados por la selva”, según dice Andrés Suárez, su fundador.
El complejo busca fusionarse con el entorno. Para su realización, fueron utilizados materiales como madera, vidrio y piedra.
Se creó una torre central para el suministro de agua y electricidad.Tiene un mirador a 12 metros de altura, una habitación en la parte baja, piscina y temazcal a nivel de piso y está interconectada con las otras 4 casas del árbol, a través de puentes colgantes de 4 metros de alto, escaleras de madera y tirolesas que transportan alimentos a las habitaciones.
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Las casas del árbol –que en total son 5– son pequeñas pero muy atractivas, de colores claros, con detalles rústicos en madera. Cada una tiene su personalidad.
En general, cuentan con cama king size con mosquitero, tina (algunas decoradas con vidrios de colores), conexión a wi-fi Starlink, vistas a la selva y muebles elaborados por artistas locales.
“Ikalar es un lugar mágico, donde cada rincón tiene un simbolismo. Cada espacio fue inspirado en la naturaleza y en la imaginación proveniente desu creador, diseñado para que las personas encuentren un lugar donde introspectar, enamorarse, meditar, escribir una historia o simplemente vivir la experiencia única de estar en la selva”, comparte Suárez.
Además de disfrutar del mágico entorno de las casitas del árbol, Ikalar ofrece catas de café, yoga, masajes holísticos, cenas románticas de 3 tiempos con decoración y paseos en bicicleta. Por las noches, se monta una pantalla gigante para proyectar películas a, aire libre.
Si lo deseas, puedes tener una sesión en su temazcal, con capacidad para una o hasta para 10 personas.
En cuanto a gastronomía, tiene un restaurante de cocina internacional y mexicana, con un menú que cambia todos los días. Abierto para desayunos, comidas y cenas. Además, hay un bar con coctelería.
En los alrededores del hotel, puedes explorar las aguas cristalinas y el campamento tortuguero de playa Akumal, refrescarte en los cenotes de Chemuyil o el Cenote Dos Ojos.
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Ikalar se encuentra inmerso en la selva maya, a unos 35 minutos en auto desde el centro del pueblo mágico de Tulum. Su dirección es: Lote 11E, Manzana 10, Predio Azteca Chemuyil, municipio de Tulum, Quintana Roo.
El costo por noche en Ikalar es de $3,000 pesos para 2 personas. Incluye solo el hospedaje y el paseo en bicicleta.
Las actividades van desde los $500 pesos por la cata de café, $1,200 por masaje, $2,000 por cenas románticas y hasta los $6,000 pesos (en el caso del temazcal).
Más información en su página web: ikalartulum.com
Instagram: @ikalar_tulum
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