En un marco semiárido en San Luis Potosí, con impresionantes paisajes y un camino muy pintoresco se encuentra el Sendero del Capitán, un circuito ideal para el trekking, admirar la naturaleza potosina y conocer más de la historia fundacional y minera del estado.
¿Te animas a caminar entre cerros, viejos pueblos mineros, matorrales y el desierto? Esta experiencia es para ti.
El nombre se lo da Miguel Caldera, hijo ilegítimo de un capitán español llamado Pedro Caldera y una mujer chichimeca de nombre María. Nacido en la actual Zacatecas, desde temprana edad dedicó su vida al servicio militar, sirviendo a la guerra contra los chichimecas, por la cual llegó a ser capitán.
Al ver la crueldad con la que los españoles trataban a los indígenas, propuso modos diplomáticos y generosidad que resultaron más eficaces en la pacificación, la colonización y la evangelización de la región del Gran Tunal.
Por si fuera poco, para 1592, mandó a mineros y soldados al Cerro de San Pedro, con la finalidad de registrar nuevas minas. Al encontrarlas, las llamó Potosí (en honor a la ciudad boliviana) y, viendo su potencial, mandó familias tlaxcaltecas para poblar la zona, por lo que se le considera uno de los fundadores de San Luis Potosí.
Al retirarse de su labor militar, se dedicó a negocios en las minas, teniendo una hacienda en el Cerro de San Pedro, por lo que este sendero era bien conocido por el capitán.
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El Sendero del Capitán forma parte de la red estatal de parques de San Luis Potosí, en la modalidad de parque lineal. Es uno de los pocos en el país que están balizados (señalizados de manera homóloga) bajo los estándares de la Fedme (Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada); es decir, senderistas de cualquier parte del mundo pueden leer esas señales.
Aunque 19.8 kilómetros puedan sonar agotadores, el recorrido está diseñado para que principiantes puedan realizarlo, ya que no hay un alto grado de dificultad y se cuentan con cuatro paradas a lo largo del camino para descansar.
El ambiente es semidesértico, ya que este es el punto donde inicia el Desierto de Chihuahua, por lo que la vegetación se compone de matorrales xerófilos (adaptados a vivir en zonas de poca agua) y yucas, una especie de palmera con hojas tiesas apuntando en todas direcciones.
Se divide en cuatro tramos: el tramo A, de Cerro de San Pedro a Virgen del Encino, con 3.3 kilómetros; el tramo B, de Virgen del Encino a Monte Caldera, consta de 3.8 kilómetros; el tramo C, de Monte Caldera a Jagüey Colorado, consiste en 4.3 kilómetros y el tramo D, Jagüey Colorado a Armadillo de los Infante, se compone de 7.6 kilómetros.
Esta experiencia la ofrece Corazón de Xoconostle, partiendo de la ciudad de San Luis Potosí muy temprano (a las 6:20 a.m.) hacia el pueblo de Cerro de San Pedro, donde se inicia el sendero.
Ya ahí, se dará una breve explicación del camino, una introducción al uso de bastones y ampliarán a detalle el entorno que se verá, el cual será principalmente un ambiente semidesértico con las yuntas como protagonistas y uno que otro árbol solitario.
Las cadenas montañosas que se divisan desde el sendero provocan un escenario mágico y muy fotografiable, con algunos spots para llevarte un gran recuerdo desde el lente de tu cámara.
Unas horas después de iniciado el trayecto, llegarás al Monte Caldera, un pequeño pueblo prácticamente fantasma de no más de 150 habitantes, con antiguas casonas coloniales derruidas y calles empedradas. Este sitio es sede de una antigua hacienda minera, propiedad del capitán Miguel Caldera.
Posteriormente, se llega al punto más alto del recorrido (unos 2,200 metros sobre el nivel del mar), donde cruzarás por una especie de cañón con un arroyo seco que, en realidad, si se ve desde las alturas, es una falla geológica que ha dejado esta ‘cicatriz’ a lo largo del tiempo. A lo lejos, se ve un pequeño parche boscoso de pino, contrastante con el ambiente árido.
Luego, el tramo más largo (de 7.6 kilómetros) inicia, con un constante descenso, teniendo dos miradores en el transcurso del camino antes de llegar a Armadillo de los Infante, un colorido pueblo con calles empedradas, casitas coloridas y una antigua iglesia.
En Armadillo, degustarás una comida regional que consiste en las yuntas: un tipo de quesadilla a doble tortilla, rellena de asado de boda y frita en salsa. Luego de unas seis horas y media de camino, se regresa en auto a San Luis Potosí.
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El costo por esta experiencia parte de los $1,425 pesos por persona (desde dos personas) y $950 a partir de tres. Incluye: guías acreditados, snack e hidratación, transporte redondo, senderismo guiado, seguro de accidentes, botiquín de primeros auxilios, entradas a propiedad privada y comida regional.
Para más información, entra a corazondexoconostle.com, a su Facebook ‘Corazón de Xoconostle’, llama o manda Whatsapp a los números (444) 657 1872 o (444) 307 6306.
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