El Muelle de los Muertos fue inaugurado en 2013. Su diseño moderno encantó a muchos; a otros no tanto, pues hubieran preferido que conservara el aire rústico de viejo puerto. Sin embargo se convirtió en una gran atracción turística, sobre todo para ver el atardecer porque, hay que decirlo, las puestas de sol en el Pacífico mexicano, sí que son únicas.
El muelle se instaló, precisamente, en la Playa de los Muertos, la cual también tiene su historia y varias leyendas del por qué de su nombre. Se encuentra en el mero centro del viejo Puerto Vallarta, en la llamada Zona Romántica, exactamente en la esquina de la calle Francisca Rodríguez y la Playa Los Muertos.
Es una de las joyas arquitectónicas más visitadas por turistas y locales. Ahí desembarcan taxis acuáticos, buques de pesca y yates. En su andador hay bancas para que te sientes a leer a las horas menos calurosas o, simplemente, para contemplar el mar.
La pasarela curvilínea del muelle conduce a una estructura de acero en forma de vela de barco. Por la noche este muelle se ilumina con un juego de luces de colores.
Foto: Cortesía Fideicomiso de Promoción Turística de Puerto Vallarta.
Si eres una enamorada o enamorado de las puestas de sol, el Muelle de los Muertos es el lugar para apreciar ese momento mágico y tan efímero a la vez. Así que en tu visita a Puerto Vallarta no olvides llegar a tiempo, antes de que el sol se despida y, por supuesto. llevar la cámara lista.
En sus inicios había un muelle muy simple, con una plataforma de madera sostenida con una estructura de acero. Solían hacer paradas barcos lujosos. Una de las embarcaciones más famosas durante los años sesenta fue el Princess Patricia, que pertenecía a la compañía Canadian Pacific Limited, con rutas que incluian diferentes destinos de México.
A principios de aquella década se generó una polémica en torno al muelle, pues se decía que el puente se construyó para la filmación de la película La Noche de la Iguana del director John Huston porque se utilizó para facilitar la transportación de equipo de filmación, materiales para las locaciones y el elenco de actores de la película que se dirigían hacia Mismaloya, una playa de ensueño donde se filmó la película. Sin embargo, el muelle ya estaba construido antes de esto.
Ya en los años noventa fue bautizado como el Muelle de la Solidaridad Vallartense. Este proyecto fue encabezado por los habitantes de la zona. Los empresarios que tenían negocios cerca de ahí, invirtieron para reconstruirlo y mejorar el aspecto de la zona.
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Foto: Cortesía Fideicomiso de Promoción Turística de Puerto Vallarta.
El 4 de enero de 2013 se inauguró la nueva cara de este muelle. El encargado de esta tarea fue el arquitecto José de Jesús Torres Vega. La remodelación fue parte de un proyecto de renovación del centro de Puerto Vallarta en el que se le buscaba dar una imagen más moderna y atractiva.
El diseño del muelle está levemente curvado y tiene 715 metros cuadrados para áreas peatonales. Tiene la capacidad de recibir seis embarcaciones medianas y además se extiende a poco más 100 metros hacia el mar. Se dice que, según la época del año, la profundidad del agua bajo el muelle va de los cuatro a los seis metros.
Si quieres conocer el muelle, es totalmente gratis.
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Foto: Cortesía Fideicomiso de Promoción Turística de Puerto Vallarta.
La Playa de los Muertos es una de las más famosas y tradicionales en Puerto Vallarta, pues se ubica en el centro histórico, en frente de una gran oferta de restaurantes y clubes nocturnos. Además, en 2020 fue nombrada una de las Mejores Playas Gay del Mundo, de acuerdo con el sitio Gaycities, un referente para el turismo LGBTQ+.
Foto: Wikimedia Commons.
En la zona se levanta la icónica escultura "El niño sobre el caballo de mar", realizada por Rafael Zamarripa en 1960. Esta escultura ha ido y venido a causa de los huracanes que han azotado la costa. En 2002 se perdió en el mar como consecuencia del paso del huracán Kenna , pero se volvió a recuperar.
En la playa también hay un peñasco, El Púlpito, con una de las mejores vistas a la bahía. Aquí solo pueden subir adultos por medidas de seguridad y para evitar accidentes.
Si visitas la Playa Los Muertos tienes que probar el platillo típico por excelencia: los pescados y camarones embarazados. ¿Qué? Así es, ese es su nombre. Se trata de camarones o pescado asados e insertados en un palo de madera, estilo brocheta.
El nombre del lugar no armoniza para nada con su ambiente relajado y divertido. Sin duda, es algo que causa mucha curiosidad. Hay varias versiones del por qué de su nombre. Te contamos algunas de estas leyendas.
Foto: Unsplash.
Antes, cuando Puerto Vallarta era un pequeño puerto, los piratas iban a esconder sus tesoros a ese rincón del Pacífico. Una noche oscura de luna llena, un capitán -el único en saber dónde estaba escondido su cofre lleno de oro y joyas preciosas- no pudo recordar el sitio que mantenía oculta esa caja de metal, así que puso a su tribulación a buscar por cada centímetro de playa hasta que apareciera su amado cofre.
Pasaron horas. Pero un pirata lo encontró. Sorprendido por la valía del motín y cegado por la avaricia, decidió no avisar de su hallazgo. Los demás se dieron cuenta y empezaron una trifulca en la que nadie saldría vencedor.
Al final, la playa quedó manchada de la sangre de los piratas. Se cuenta que, cuando los lugareños vieron los cuerpos en la arena, decidieron llamarla la Playa de los Muertos.
Otra de las leyendas dice que la playa era un cementerio sagrado de una etnia local. Incluso en la arena se podían encontrar huesos humanos, vasijas o pedazos de cerámica, reconocidos como vestigios de una cultura antigua. Según los habitantes de Puerto Vallarta esta leyenda es la que se apega mejor a la razón del nombre de la Playa de Los Muertos.
Otra versión también asegura que fue un panteón y que cuando comenzaron a vivir personas en la zona, el cementerio se tuvo que trasladar a otro sitio. De allí también el nombre de la playa.
Foto: Pixabay.
Hay una historia más. Se cuenta que frecuentaban el pequeño puerto para aprovecharse de los lugareños y robarles sus pertenencias y alimentos. Hartos de esto, los habitantes de la zona decidieron ponerle fin. Esta lucha terminó en desgracia y mucha gente no sobrevivió. Al término de este enfrentamiento, los pocos que salieron con vida decidieron llamarla la Playa de Los Muertos.
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