¿Te sentirías más tranquilo al viajar si hubiera un indicador de que el avión ha pasado por un protocolo de limpieza ? Y, ¿crees que la psicología del color pueda ser un factor importante para volver a viajar con confianza? Una firma de diseño cree que sí, y por eso inventó un asiento de avión que cambia de color cuando lo desinfectan .

Se trata de PriestmanGoode, una empresa londinense que acaba de anunciar un nuevo concepto de diseño interior para aviones llamado Pure Skies, el cual intentaría adaptarse a la nueva normalidad que la industria de la aviación enfrentará a partir de la pandemia de Covid-19 .

El concepto abarca diversos aspectos de viajar en avión: desde la experiencia para los usuarios y la tripulación hasta las operaciones a gran escala. Esto último ha sido un tema muy discutido dentro de la industria en los últimos meses, por los retos que implicaría a futuro la implementación de nuevos protocolos o niveles de ocupación, por ejemplo.

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Cómo cambiaría el color

La idea del asiento que cambie de color es solo una de las nuevas características del diseño en cabina que presenta PriestmanGoode, pero sin duda es la más atractiva.

Según el nuevo concepto, el material de los asientos incluiría tintas fotocrómicas y termocrómicas, las cuales reaccionan con algunos métodos de limpieza que se han vuelto comunes a partir de la pandemia, como la luz UVC y el tratamiento con calor.

El cambio de tonalidad funcionaría como un aviso para los viajeros de que su asiento es más seguro, con el fin de reducir la ansiedad por el viaje.

Si esta tecnología fuera utilizada en el futuro, la transición por la sanitización sería representada con un tonos morados. Después, el asiento pasaría a lucir tonos durazno y amarillo, para generar una atmósfera cálida y positiva. El efecto tras la limpieza desaparecería una vez que te has establecido en tu asiento.

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Más sobre el nuevo diseño

El concepto Pure Skies se divide en dos áreas del avión: Rooms (es decir, la clase ejecutiva) y Zones (clase económica).

En clase económica, estas serían otras características recién diseñadas:

-Instalar pantallas de división entre algunos grupos de filas, para crear mayor separación.

-Algunos asientos estarían acomodados de manera “escalonada”, para dar mayor sensación de espacio personal.

-La parte trasera del asiento sería lisa, sin grietas que permitan que la suciedad se genere. Los mecanismos para reclinar el asiento serían reacomodados, para que no tengas contacto con superficies difíciles de limpiar.

-Quitar definitivamente las bandejas de comida unidas al asiento frente a ti. En su lugar, las sobrecargos te entregarían una bandeja removible que podrías enganchar al asiento a la hora de comer.

-Ofrecer la opción de colgar tu propia bolsa frente a ti, en lugar de tener un compartimento de tela o red para las revistas y objetos personales.

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En la clase ejecutiva, estos serían algunos de los cambios:

-Cada asiento estaría por completo aislado de los demás con cortinas.

-Se utilizarían materiales y acabados antimicrobianos para los asientos.

Cabe mencionar que podría tomar al menos tres años que las aerolíneas realmente desarrollaran y certificaran nuevos diseños de cabina diferentes a los que se usan actualmente.

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