No hay duda, el glamping está en tendencia. Pero, ¿sabes cómo surgió este gran concepto de alojamiento y en qué consiste? A continuación, te lo contamos.
¿Qué es un glamping?
Es un tipo de alojamiento cuyo nombre compuesto por dos palabras lo dice todo: glamour + camping. Se trata de ‘acampar’ pero sin perder comodidades: duermes en una cama calientita, te bañas bajo una regadera con agua caliente también y no pasarás penurias al momento de ir al baño. Además, muchos de estos espacios están decorados a detalle, a veces, mejor que una habitación de hotel. Es lo mejor de dos mundos porque pasarás la noche en medio de la naturaleza.
El glamping puede estar conformado por domos geodésicos desmontables, burbujas totalmente transparentes, tiendas estilo safari, casas de árbol y más.
Es para un viajero dispuesto a vivir experiencias diferentes, lejos de las multitudes, pues el glamping generalmente se instala en sitios apartados de las ciudades, cerca de pueblitos, en medio del bosque, de la selva o a la orilla del mar.
Casi siempre, debes reservarlo con anticipación porque ofrece muy pocos espacios.
¿Cuál es el origen del glamping?
El origen del glamping data de hace muchos siglos, cuando los reyes y sultanes viajaban, junto con sus ejércitos a tierras remotas a conquistar territorios. Por supuesto, ellos no renunciarían a sus lujos, así que había que cargar hasta con el 'perico'. Se montaba una carpa y prácticamente se decoraba con alfombras, sedas, camas, y demás mobiliario.
Lee también: Lugares románticos para celebrar tu boda en Guanajuato
Siglos después, en el XIX, este tipo de alojamiento acompañó a grandes exploradores en sus viajes por África. Eran los años de los británicos Gordon Laing, Varney Cameron y David Livingstone.
¿Cuándo se inventó la palabra glamping?
La palabra ‘glamping’ se usó por primera vez en Reino Unido en 2005, ya con fines turísticos. Se incluyó en el Diccionario de Oxford apenas en 2016.
¿Por qué es bueno dormir en un glamping?
Al estar rodeado de naturaleza, se mejora tu estado de ánimo. El contacto con la luz solar, el aire fresco y la actividad física contribuye a que segregues serotonina, la hormona de la felicidad que genera sensaciones de bienestar, relajación y, según especialistas, aumenta la autoestima.
Al dormir en medio de la naturaleza, descansar mejor y lograr un sueño de más calidad. No hay ruido, no hay luz artificial. Todo es más relajante.
Este alojamiento es sustentable
Generalmente, las estructuras de un glamping son desmontables y pequeñas. Su impacto al ambiente es mucho menor porque ocupan menos espacio, alojan a un número de turistas mucho menor que en un hotel convencional e incluso reciclan terrenos para su instalación.
Lee también: Los 10 Pueblos Mágicos más visitados de México
Muchos utilizan energías renovables: luz solar, eólica o biocombustible. Además, estos alojamientos generan empleo entre las comunidades aledañas y permiten al viajero explorar lugares escondidos y acercarse a culturas que para la mayoría no son conocidos.
Para empezar, conoce Nómada Glamping
Te recomendamos quedarte en Nómada Glamping SMA. A unos 20 minutos de San Miguel de Allende, Ciudad Patrimonio de la Humanidad, se encuentra este alojamiento de 8 tiendas tipo safari para 2 y 4 personas.
Disfruta de sus dos albercas de aguas termales y su jardín de hamacas. Con costo adicional puedes solicitar un recorrido en cuatrimotos, una cabalgata por San Miguel, visitas a viñedos a la única cervecería artesanal de la ciudad.
También puedes reservar una noche de cine al aire libre o un vuelo en globo.
El desayuno continental está incluido. Nómada Glamping cuenta con asadores. También puedes contratar un brunch, una carne asada o pedir que te preparen una tabla de quesos.
Contacto: nomadaglampingsma.com
Recibe todos los viernes Hello Weekend, nuestro newsletter con lo último en gastronomía, viajes, tecnología, autos, moda y belleza. Suscríbete aquí: https://www.eluniversal.com.mx/newsletters