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Los autobuses llegan cuando el sol comienza a elevarse sobre los Andes peruanos . Tres horas de viaje desde el centro de Cusco hasta el pueblo de Pitumarca , valen la pena cuando observas picos nevados y valles dorados donde pastan llamas y alpacas. Pero, este no es tu destino final. En realidad, es aquí donde inicia el viaje para conocer la famosa “ montaña de los siete colores ”.
Desde hace dos años, el paisaje surrealista que ofrece Vinicunca atrae a cientos de viajeros que, sin importar el frío y la altitud (cinco mil 45 metros sobre el nivel del mar), suben hasta la cima para contemplar un inmenso “ arco iris ” de piedras y minerales, que se asentó hace millones de años y que por el movimiento de las placas tectónicas se elevó hasta convertirse en una montaña , con franjas de color fucsia, turquesa, lavanda y verde.
(Foto: iStock)
La expedición
El ascenso a Vinicunca se puede hacer de dos maneras: caminando cuesta arriba por más de tres horas o a caballo . Este último servicio es el más recomendable, si no tienes buena condición física o padeces de hipertensión y problemas respiratorios.
Los pobladores de las comunidades indígenas que habitan en las faldas de la montaña son los guías que llevan a los turistas hacia la cima .
(Foto: iStock)
Ellos mismos cuentan que la montaña forma parte de la ruta de trekking hacia el nevado de Ausangate , la quinta cumbre más alta de Perú . Sin embargo, por el cambio climático, la nieve que cubría a Vinicunca desapareció y dejó al descubierto las vetas . También hablan sobre los minerales que las conforman. Por ejemplo, las rosas son una mezcla de arcilla roja con fango; las moradas tienen calcio y silicatos; y las blanquecinas son un cúmulo de arena de cuarzo y piedra caliza.
En la cumbre
Ochenta metros antes de conquistar la cima , los viajeros que subieron a caballo deben descender y continuar a pie, pues el suelo es arenoso y los animales podrían resbalar y caer al vacío.
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Ya arriba, los guías ofrecen frutas , agua y hojitas de coca para evitar o contrarrestar los síntomas del mal de montaña , como dolor de cabeza, mareo y taquicardia.
Observar el contraste de colores con el cielo despejado es la única actividad que se puede hacer cuando se ataca la cumbre . Después de hora y media de contemplación , inicia el descenso.
(Foto: iStock)
Antes de regresar a Cusco , se hace una comida en la base de la montaña . Hay tiempo libre para comprar souvenirs andinos elaborados con lana de alpaca, como ponchos y chullos, los famosos gorros con orejeras.
GUÍA DEL VIAJERO
Quién te lleva
realiza viajes de un día a Vinicunca , por 35 dólares por persona. Incluye transportación local, desayuno y comida, guía y cilindro de oxígeno portátil para el mal de montaña.
Tómalo en cuenta
Los viajes se pueden suspender entre enero y marzo, debido a las fuertes lluvias. Se recomienda reservar el recorrido con un día de anticipación, ya sea en línea o en las agencias de viajes que hay en la plaza principal de Cusco .