Clase y elegancia definen la esencia del parisino Distrito 16, conocido como Passy . En el corazón de la zona, Shangri-La Hotel ocupa el histórico edificio de finales de siglo XIX que fue residencia privada del príncipe Roland Bonaparte, sobrino nieto de Napoleón Bonaparte. Está totalmente restaurado, pero aún conserva su esplendor original y patrimonio.
Espacios esenciales
Este señorial palacio con 101 habitaciones, incluidas 36 suites, spa, alberca cubierta y health club, ofrece una experiencia gourmand en sus tres restaurantes: el francés L’Abeille, con dos estrellas Michelin; el cantoné s Shang Palace , con una estrella Michelin; y La Bauhinia , de cocina francesa y del sudeste asiático.
Un bar de temporada
Solo para este verano S hangri-La Hotel y Casa Krug se asociaron para inaugura r Le Bar à ciel ouvert by Krug . El espacio, en una de las habitaciones más bonitas del hotel, que integra una terraza, ha sido rediseñado para evocar un oasis con espectaculares vistas de del Sena y la Torre Eiffel.
El bar tiene capacidad para 30 personas y permanecerá abierto hasta el 7 de octubre.
Por amor al champán
La temática se debe a la edición 166 del icónico Champagne Krug del viñedo Krug Grande Cuvée. Para un maridaje perfecto, el champán puede acompañarse con delicados aperitivos, a base de productos franceses de temporada, creados po r Christophe Moret, chef estrella del hotel .
La historia de Casa Krug (la primera compañía en desarrollar las Cuvées de Prestige) se remonta a 1843, cuando Joseph Krug la fundó con el ideal de crear, año tras año e independientemente de la variabilidad climática y las cosechas, un champán de genuina calidad. Así nació Krug Grande Cuvé e. Desde entonces y hasta ahora, la marca presta especial atención a la identidad de cada parcela de tierra para preservar y mejorar el carácter de su vino, que es monitoreado y probado de manera individualizada. shangri-la.com/paris/shangrila