Tigres tiene una de las mejores plantillas de la Liga MX aunque ―con el paso de los años― muchos han dicho que se ha vuelto "veterana". Una forma muy amable de mencionar que sus mejores años están concluyendo.
Es por esa razón que se ha recurrido a otros clubes para reforzarse, en este caso, Cruz Azul.
La política de Tigres, en los últimos meses, es la de traer jugadores jóvenes a un equipo que ha tenido, por muchos años, su base en jugadores consolidados como André-Pierre Gignac, Guido Pizarro, Nahuel Guzmán, Rafael Carioca y Javier Aquino.
Obviamente, el fin de la carrera de estos futbolistas se acerca y es momento de renovar el plantel. La llegada de gente como Marcelo Flores, Ozziel Herrera y Sebastián Córdova es la muestra.
Ahora se ha sumado un nuevo jugador, un defensa central que estaba tachado por el Cruz Azul de Martín Anselmi.
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Al equipo de los Tigres ha llegado un jugador surgido de las fuerzas básicas de Cruz Azul que estaba borrado por Martín Anselmi.
Rafael Guerrero terminó su contrato con el equipo cementero, con el que no jugaba desde la Jornada 9 del Clausura 2024.
Al llamado "Cachorro" Guerrero se le puso la cruz encima cuando en el juego de la Jornada 9 ante León del torneo de Clausura 2024. Tuvo graves equivocaciones que, si bien no provocaron la derrota de su equipo, si hicieron que el técnico ya no confiara en él.
Es por eso que la directiva cementera no hizo nada por renovar su contrato y ante la nula acción, decidió irse del equipo de La Noria y seguramente Gerardo Torrado, exjugador cementero y nuevo director deportivo del equipo regio, decidió ficharlo.
Ahora Rafael Guerrero deberá luchar por rescatar su joven carrera compitiendo con gente como Guido Pizarro, Diego Reyes, Eduardo Tercero, Samir Caetano y Joaquim Pereira, recientemente contratado por el equipo bajo el mando de Veljko Paunovic.