La centrocampista del Barcelona, Aitana Bonmatí, marcó historia. Y es que, este jueves, fue reconocida como la Jugadora del Año por la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA).
Durante su discurso de premiación, Aitana ―de veinticinco años― mandó un mensaje fuerte y claro: el balompié necesita cambios y ante todo, es imperativo alzar la voz en defensa de las futbolistas. Especialmente, tras lo acontecido entre Jennifer Hermoso y Luis Rubiales.
"Como sociedad, no podemos permitir que haya abusos de poder en una relación laboral. Ni faltas de respeto. […] Desde mi compañera, Jenni, me gustaría dedicar esto a todas las mujeres que sufren lo mismo", sentenció.
Aitana es una pionera en el futbol femenil. Además de visibilizar las violencias que viven las mujeres y la importancia de la salud mental, ha ganado dos veces la Women's Champions League y recientemente, se coronó con España en la Copa Mundial Femenina de la FIFA.
Sus logros no terminan ahí. De acuerdo a la UEFA: "Bonmatí fue nombrada Jugadora de la Temporada y Jugadora del Partido en cinco de los once partidos del Barcelona, y fue igualmente eficaz en la conquista de un nuevo título liguero".
Ésta es su historia.
Oriunda de San Pedro de Ribas, un municipio ubicado en Barcelona, España, Aitana nació el 18 de enero de 1998. Con tan sólo trece años de edad, entró al FC Barcelona.
Aitana llegaba a sus entrenamientos en transporte público. Y es que, durante una entrevista con el diario español As, reveló que su mamá sufre de fibromialgia enfática crónica; por ello, había ocasiones en las que le era complicado acompañarla. Llegaba a su casa, aproximadamente, a la una de la mañana.
"Bonmatí" es su apellido materno. Rosa Bonmatí ―madre de la futbolista― luchó para lograr el cambio. ¿La razón? Los padres de Aitana siempre buscaron la equidad entre hombres y mujeres.
Esto se reflejado en el carácter de Aitana. En sus redes sociales, después de lo que sucedió con Luis Rubiales, se posicionó rápidamente y apoyó a Jennifer Hermoso.