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La afición de la NFL quedará paralizada ante una nueva edición del que se ha catalogado como el “Super Bowl mexicano”. El choque entre Steelers y Cowboys, dos de las franquicias más ganadoras en la historia, y cuyas aficiones reviven al máximo esta rivalidad.
La Cortina de Acero recibe a la Estrella Solitaria en un partido de alta tensión; la enemistad de estos dos equipos encaja perfectamente: Dallas pertenece a la Conferencia Nacional y Pittsburgh es de la Americana, ambos ostentan cinco anillos de campeonato y se han enfrentado tres veces en el Super Bowl.
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Y aunque Steelers puede presumir que, de esas tres disputas por el Vince Lombardi, en dos terminó con el trofeo en sus vitrinas, los Cowboys llevan la ventaja en el récord histórico por un partido (17-16), y también se jactan de protagonizar la mayor humillación, cuando en 1966 desgarraron a los de Pittsburgh 52 puntos a 21.
Steelers (3-1) llega demostrando que sus aspiraciones son de equipo grande, y su defensiva, la cual es la segunda mejor en la Liga en puntos permitidos, presionará a un cuestionado Dak Prescott.
Dallas (2-2) quiere convencer a los escépticos y comprobar que es un equipo de Super Bowl, pero las posibles bajas en su defensiva de Micah Parsons y Demarcus Lawrence complican la tarea, mientras que Justin Fields permanecerá como pasador rival.
