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Dallas.— Se acabó. Eso es lo que dicen los números. Habrá un campeonato número 18, que batirá récords, para que los Celtics de Boston celebren pronto, tanto como esta misma noche.
Tienen una ventaja de 3-0 en Las Finales 2024 de la NBA, diferencia que nunca se ha desperdiciado en ninguna serie de la Liga, sin importar la etapa.
Las estadísticas son absolutas y completamente demoledoras.
Pero hay que reconocer que los Celtics no dan nada por sentado.
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Quizá en el penúltimo día de la temporada 78 de la NBA, Boston —que hoy podría acabar con los Mavericks de Dallas en el Juego 4— intentaba desesperadamente mantener las cosas lo más cerca posible de lo habitual, dado que que el primer título del equipo en 16 años está ahora a sólo una victoria de distancia.
“Al final del día, somos los más vulnerables en esto”, dijo el entrenador de los Celtics, Joe Mazzulla, quien a sus 35 años podría ser el más joven en ganar un título desde que Bill Russell se adjudicó uno como jugador-entrenador de Boston en 1969.
“Por lo tanto, tenemos que permanecer con un sentido de urgencia. Debemos tener una comprensión de nuestro entorno. Tenemos que saber que somos tan vulnerables como cualquier otra persona en esta situación, y cómo manejemos eso determinará nuestro destino”, agregó.
Su filosofía es “no cedas”. Un equipo que ha tenido marca de 79-20 en sus primeros 99 juegos de la temporada (se encuentra en camino de lograr el segundo mejor récord en una sola campaña, en la historia de los Celtics) probablemente haría bien en seguir haciendo lo que funcionó durante todo el año.
Una vez más.
