Hablar de Michael Phelps es mencionar al deportista más ganador de medallas en los Juegos Olímpicos (28) y del mejor nadador en la historia, pero también de una persona que logró superar una durísima depresión y que hoy, con eso que sufrió, busca apoyar a personas que pasen por alguna situación similar.
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"En el 2014 tuve una segunda depresión. No quería estar vivo, no comía, no bebía, me fui a un centro de recuperación; estaba luchando por mi vida más de lo que se pueden imaginar. En esos momentos me daba golpes porque pensaba 'no estoy haciendo mi trabajo'", explicó el estadounidense en el World Business Forum en Madrid.
El nacido en Baltimore en 1985 reconoció que quizá ahora sea más recordado por esos episodios grises de su vida, pero esa situación la ha tomado de una forma en que pueda ayudar a personas que no la estén pasando bien.
"Seré más recordado por mi postcarrera que por las medallas que gané, que son increíbles pero que no son lo que yo soy. Quiero ayudar a los que la están pasando mal, salvar vidas. Yo también pensé en suicidarme y quiero ayudar a las personas. Hay luz alfinal del túnel y hablar de estos temas me ha salvado la vida", dijo.
"En el deporte hay mucha gente que dudaba de mis objetivos, pero en realidad era algo que era viable. Pensaban que ganar una medalla de oro era imposible; quiero enseñar a los jóvenes que no importa lo que persigas, siempre se puede conseguir", aseguró el exnadador, quien además lanzó un contundente mensaje: "No hay que tener miedo de seguir nuestras metas".