Anastasija Sevastova acabó con la marcha triunfal de Maria Sharapova.
La letona se impuso 5-7, 6-4 y 6-2 sobre la rusa.
Sevastova, de 27 años de edad, a pesar de que perdió la primera manga, gracias a los golpes ganadores de Sharapova, quien estaba todavía con las fuerzas físicas intactas, poco a poco fue imponiendo su mejor tenis desde el fondo de la pista y haciendo desgaste en la rusa de 30 años.
El poder de Sharapova comenzó a perder fuerza con sus golpes y ahí surgió la consistencia de Sevastova que restó mejor y también mantuvo su saque que le permitieron empatar el marcador.
Después de 2 horas y 16 minutos, el estilo de la letona se impuso ante Maria. Así terminó el regreso de Sharapova a un Grand Slam. La rusa volvió a la competición después de 20 meses de ausencia por cumplir sanción de dopaje.
“Conseguir el triunfo ante Sharapova es algo especial, pero hacerlo en el ambiente tan único que se da en la pista Arthur Ashe hace que sea todavía más divertido y grandioso”, declaró Sevastova.
La rival de la letona en los cuartos será la estadounidense Sloane Stephens, quien venció, por 6-3, 3-6 y 6-1, a la alemana Julia Goerges, trigésima cabeza de serie.
“Esta semana fue muy emocionante”, dijo Sharapova. “Estoy muy agradecida por la oportunidad, di lo mejor de mí y estoy orgullosa”.
“Me llevo muchas cosas positivas. Jugué cuatro partidos frente a un gran público. Competir en este ambiente, eso era lo que extrañaba, y eso no se da en cualquier lado. Jugar un Grand Slam es especial”, agregó la campeona del US Open en 2006.
El duelo entre Sevastova y Stephens, de 24 años de edad, será el primero que mantengan en su carrera profesional.
La estadounidense y novena sembrada Venus Williams avanzó a cuartos de final al derrotar por 6-3, 3-6, 6-1 a la española Carla Suárez Navarro, la sembrada número 35.
Williams, siete veces campeona de torneos de Gran Slam y subcampeona este año en el Australia Open y Wimbledon, demostró su mejor ofensiva ante la europea y buscará colarse a las semifinales.
Venus, de 37 años de edad, fue campeona del US Open en 2000 y 2001, pero en los últimos cinco años no ha podido ir más allá de los cuartos de final.