Santos Laguna fue mejor, intentó más veces sobre el arco rojiblanco y como premio después de momentos de poca claridad derrotó (2-1) a Guadalajara, equipo que además de perder el invicto dejó dudas en Torreón.
Los de Paunovic no se encontraron y alejados de su mejor versión se mostraron endebles ante los locales, que con un segundo tiempo de intensidad sumó tres puntos vitales.
Tal parece que Guadalajara no logra encontrar en el campo las conexiones que lo hicieron llegar a la final la temporada pasada contra Tigres, los rojiblanco ofrecieron muy poco en la primera parte.
Una situación que sumada al bajo ritmo de Santos entregó un primer tiempo para el olvido, que para fortuna de los asistentes cambio por completo en el segundo tiempo.
Parte que vivió más emociones en las metas, siendo los locales los que no tardaron en tormar ventaja, gracias a la anotación de Juan Brunetta al 56'.
Tanto que despertó el compromiso y causó una leve reacción en Guadalajara, misma que se apagó con rapidez tras el segundo de los guerreros de los pies de Duván Vergara al 72'.
Anotación que parecía sentenciar el resultado, pero de nueva cuenta provocó un golpe anímico que ahora si se reflejó en el marcador después de la marcación de un penal, segundos después bien cobrado por Roberto Alvarado al 84', que fue insuficiente y selló la derrota.