Horas antes de disputar un partido de la liga femenina mexicana en 2021, la futbolista Nailea Vidrio recibió una amenaza de muerte y a pesar de que le avisó a su equipo, el León, los encargados minimizaron que su vida estaba en riesgo.
“En un partido de León contra Tigres en León me pusieron en mi Instagram que ese sería mi último partido. Me dijeron ‘te vamos a matar’. Nadie hizo nada al respecto. Le dije a mi club, pero se lo tomaron a la ligera porque ‘fue en una red social’. Nos tienen que matar para que pase algo”, comentó a EFE la centrocampista de las Tuzas del Pachuca.
Vidrio es una de las futbolistas de la liga local que todos los días son acosadas digitalmente. Las agresiones expulsaron de México en marzo pasado a Scarlett Camberos, entonces delantera de las Águilas del América.
Como a Camberos, quien fue seguida a su casa por el acosador, a Vidrio, hija del ex jugador del Osasuna español Manuel Vidrio, los ataques pasaron de lo virtual al mundo real.
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También cuando militaba en León, la antigua jugadora asistió a apoyar al cuadro masculino en un partido de la Liga de Campeones de la Concacaf ante el Seattle Sounders, en el que recibió chiflidos y comentarios sexuales sobre su cuerpo por parte de hinchas.
La antigua futbolista del Cruz Azul incluso ha recibido en sus redes sociales amenazas de violación y ante la falta de garantías de sus equipos ha llegado al punto de tener que cargar con armas blancas para defenderse.
“Ese día contra Tigres yo estaba viendo quién me estaba apuntando con algo. Vives con miedo. En mi carro tenía un cuchillo por si algo pasaba. Por las noches dormía con miedo de que alguien entrara a mi puerta”.
Nailea Vidrio detalló que en el León el apoyo que le dieron fue moral, pero nunca le ofrecieron ir a denunciar.
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Cuando fue a intentar interponer la denuncia sin apoyo del León, se topó con la impunidad que reina en México, que provoca más de 10 feminicidios al día y miles de agresiones a mujeres que se quedan sin castigo.
“En lo de León fui con las autoridades y me dijeron que no había pruebas. Realmente sólo necesitamos que nos crean. Hasta que nos maten harán algo”, reiteró la oriunda de Guadalajara.
La centrocampista reconoció los esfuerzos que ha hecho la liga mexicana, como el protocolo para prevenir la violencia de género que lanzaron en julio pasado; sin embargo, pidió mayores medidas como leyes que castiguen con más severidad a los agresores.
En el caso de Camberos se expuso la falta de legislación para atacar el acoso de digital ya que la ex jugadora del América abandonó el país para fichar por el Angel City estadounidense porque las autoridades de Ciudad de México sólo pudieron castigar con un arresto de unas horas al agresor.