Desde su creación, la Liga MX Femenil se ha visto envuelta en una polémica común, que tiene que ver con la diferencia de salarios entre la categoría varonil y la femenil.
Un conflicto que pese al crecimiento de afición y trasmisión en televisión no ha sido suficiente para varias jugadoras, quienes incluso se han retirado para buscar una profesión que deje mejores ganancias.
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De acuerdo con palabras de Alicia Cervantes, goleadora de Guadalajara, en un principio el salario para las jugadoras era de mil 500 pesos.
Cantidad que subió tras la lucha por parte de las jugadoras, quienes lograron un sueldo base de 4 mil 500 pesos, dando un promedio de 10 mil pesos mensuales.
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Pago que no aplicaría para instituciones como América, Tigres, Monterrey y Pachuca, quienes han apostado por traer importantes figuras que ganan más de 100 mil pesos.