Cada vez que hay un Mundial Sub-17 y en él participa la Selección Mexicana, las expectativas son realmente altas.
El Tricolor Sub-17 es potencia en esta categoría, ya que en su haber tiene dos títulos mundiales.
El primero conquistado en Perú 2005, en el que bajo el mando de Jesús Ramírez surgieron jugadores como Carlos Vela, Giovani dos Santos, Adrián Aldrete y Héctor Moreno, entre otros.
Y el segundo fue conseguido en la Copa del Mundo de México 2011, con Raúl Potro Gutiérrez como técnico, con jugadores como el Antonio Pollo Briseño, Alfonso González y Carlos Fierro.
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Ahora bajo el mando de Raúl Chabrand, se tratará de repetir la hazaña en el Mundial de Indonesia, donde este día se verán las caras en su primer juego del Grupo F con el equipo de Alemania.
El partido se celebrará en el estadio Jalak Harupat, de Bandung, que es donde se desarrollará la mayoría de los encuentros de este Mundial de la FIFA.
Los otros dos rivales de México en la fase de grupos son Nueva Zelanda y Venezuela.
“Se ha preparado bien el equipo, ha tenido un buen seguimiento y juegos, aunque en puerta hay un grupo difícil hay muy buenas expectativas”, indicó Ivar Sisniega, presidente de la Federación Mexicana de Futbol.
México llega a este evento como subcampeón del mundo, ya que en la pasada edición celebrada en Brasil en 2019, se perdió la final contra el anfitrión.
La Copa del Mundo que se debía jugar en Perú en 2021, se canceló debido a la pandemia de Covid-19.