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El francés Karim Benzema se despidió este domingo del Santiago Bernabéu tras 14 temporadas. Un césped sobre el que fue criticado, e incomprendido, cuando puso su fútbol al servicio del portugués Cristiano Ronaldo, al que con su marcha en 2018 sustituyó para elevar su nombre al de las leyendas del Real Madrid.
“Cada año es igual. La gente no entiende lo que hago en el campo. Yo juego para la gente que sabe mucho de fútbol, para hacer historia y rendir al máximo nivel”, dijo en 2018 cuando con el adiós del luso las exigencias goleadoras le caían a él.
Y cumplió con creces. 30, 27, 30, 44 y 31; sus registros goleadores liderando el ataque de un Real Madrid al que lideró hasta la victoria en su competición fetiche, la Liga de Campeones de las remontadas de la pasada temporada, para terminar de escribir su nombre en las páginas de oro del club.
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Esas que recordarán su jugada en línea de fondo del Vicente Calderón, los tres goles contra el París Saint-Germain en el Santiago Bernabéu... Y este domingo, 4 de junio, cuando sorprendió por la mañana un comunicado del Real Madrid anunciando el adiós de un Benzema que horas más tarde se despidió sobre el césped. Y el martes lo hará en un acto oficial en la Ciudad Deportiva de Valdebebas.
Atronadora ovación cuando por última vez sonó por megafonía del Bernabéu para anunciar los once titulares “y con el nueve, Karim... ¡Benzema!”
Una despedida que comenzó desde el calentamiento cuando el francés dirigió varios gestos de agradecimiento a la grada del Santiago Bernabéu aún en obras y que no podrá estrenar la próxima temporada sobre el césped.
Durante el partido se coreó su nombre en repetidas ocasiones a la par que sus compañeros le buscaban en cada acción de peligro para intentar que dijera adiós con gol para cerrar una tarde de despedidas.
Y así fue, aunque desde el punto de penalti. Un manotazo de Yuri a Militao en un salto dentro del área propició la ocasión perfecta para que Karim se despidiera con gol.
Benzema engañó a Unai Simón y firmó su 354º gol con la camiseta del Real Madrid. El segundo máximo goleador de la historia del club amplió su marca. En la celebración, el dedo índice de la mano derecha, ya con el icónico vendaje, dirigiéndolo a la grada del Santiago Bernabéu en un gesto de agradecimiento.
El primero en abrazare fue un Vinícius Junior que tras conocer su adiós compartió un emotivo mensaje en sus redes sociales.
“Cuando el chico de São Gonçalo, demasiado tímido, llegó a Madrid en 2018, fuiste el primero en recibirme. Nunca lo olvidaré. Crecí contigo. Ganamos España, Europa y el mundo juntos. Y pude aplaudir su Balón de Oro con mucho orgullo", escribió.
Tras el gol, su técnico, el italiano Carlo Ancelotti, le sustituyó para que el actual Balón de Oro recibiera el cariño de su afición por última vez. Esa que le ha acompañado las últimas 14 temporadas en las que ganó más títulos que ningún otro jugador, los mismos que le acompañarán el martes en su adiós definitivo antes de poner rumbo a Arabia Saudí: 5 Copas de Europa, 5 Mundiales de Clubes, 4 Supercopas de Europa, 4 Ligas, 3 Copas del Rey y 4 Supercopas de España.
Abrazo sentido con Ancelotti y ovación de un público del Santiago Bernabéu en pie que pudo celebrar por última vez un gol de Karim Benzema.
