A los 9 años, Juan Celaya soñaba con conquistar una presea olímpica. Lo logró 16 años después, gracias a un intenso trabajo de seis meses junto a la mítica Ma Jin.
“Cuando llegué con Ma Jin, tuve que deconstruir mucho mi técnica, empezar de cero, como si no supiera hacer clavados”, contó el regiomontano, en entrevista exclusiva con EL UNIVERSAL Deportes.
Celaya entrenaba en su natal Nuevo León y fue la ambición de ganar la razón por la que viajó a la Ciudad de México para poder alcanzar el anhelado objetivo.
“Tenía claro que lo mejor era ir a donde estaba la mayoría de los trampolinistas, ir a donde está el mejor [Osmar Olvera] y, si tenía que cambiar mi entrenador una vez más, lo iba hacer”, expresó Juan.
El clavadista de 26 años llegó a principios de 2024 a las instalaciones del Centro Nacional de Alto Rendimiento, para incorporarse al equipo de trabajo de la entrenadora china. Ahí comenzó un proceso nuevo en su carrera, siempre con la clasificación a París 2024 en mente.
“De enero a junio, fueron seis meses de trabajo duro, sin ver el reloj, sin cansarme, sin lesiones... Era no desistir del objetivo, porque ya estaba cerca”, comentó Juan, quien en este lapso bajo las órdenes de la preparadora china “crecí y mejoré mi técnica, detalles en los que no ponía atención antes, desde cómo respirar, cómo pararme, dónde pisar en el trampolín, hasta cómo peinarme y parpadear”.
Con estos ajustes en el trampolín, afrontó los “cuatro días de selectivo para ir a París 2024. Estuvimos cinco clavadistas tirando seis saltos 24 veces”. Resultó victorioso.
Después, la meta de Juan cambió a subir al podio y viajó a los Juegos Olímpicos concentrado.
“Llegué con mucha hambre de triunfo, quería disfrutar mi competencia, hacer un gran papel”, indicó el especialista en trampolín y medallista.