Tiene 16 años, un talento prometedor sobre los bólidos y a su más grande ídolo en casa: su padre.
Ivanna Richards -hija del piloto Homero Richards-, a su corta edad es campeona de karts, corre Gran Turismo y sueña en grande. Sabe que ella pronto puede ser una referente del automovilismo mexicano y este año ha sido impulsada al ser nombrada embajadora del Gran Premio de México.
"Todas esas oportunidades y logros me han llevado lejos y son pasos para conseguir más cosas", dijo en entrevista exclusiva con EL UNIVERSAL Deportes.
Su andar en el deporte motor inició en sus primeros años de vida, todo gracias a que acompañaba a Homero a sus competencias. Fue entonces que se dio cuenta que seguiría los pasos del hombre a quien llama padre y a quien considera su único ídolo.
"Sólo tengo un ídolo y ese es papá. Si estoy aquí es por su apoyo y es parte importante de lo que he logrado", mencionó. "Desde chiquita iba diario a los karts con él, un día le dije que me quería subir, incluso mi mamá ni siquiera lo sabía", recordó.
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Ivanna aceptó que probar la velocidad le hizo no querer volver a soltarla y más sabiendo que de respaldo tenía a un experimentado con su mismo apellido.
"Una vez que me subí (a correr), la adrenalina y velocidad me marcaron, así fue como empezó todo".
Ivanna fue campeona de MicroSwitf en el 2018, de MiniSwift en 2019-20 y de KZ2 en el 2022.
La capitalina en 2021 recibió la Distinción a la Excelencia en el Deporte Motor al ser de las cuatro mejores niñas del planeta en el programa Girls on Track de la academia de Ferrari. Además, es la primera mexicana en participar en la F1 Academy.
Ahora, lleva por delante el reto de representar al GP de México, la carrera de casa y a la que no deja de señalar como la fiesta de este deporte.