Gilda Guadalupe Cota Vera tuvo que esperar paciente el paso de cada una de las participantes en la prueba de impulso de bala femenil F33, en el Stade de France, para celebrar junto a su familia la duodécima presea de México en los Juegos Paralímpicos 2024.
Con la etiqueta de favorita, la mexicana y poseedora del récord mundial (8.23 metros), logrado en abril en Veracruz, se plantó con confianza en la pista y, luego de un segundo lanzamiento nulo, tomó ritmo y marcó su mayor distancia en la competencia, que fue de 7.89 metros.
Visiblemente nerviosa, la yucateca observó durante más de una hora a sus rivales acercarse, pero no superar la marca que le permitió cumplir los pronósticos y subir al podio francés con la medalla de plata, quedando a nueve centímetros del oro, que fue para la china Qing Wu, quien hizo 7.98 metros.
“El triunfo me sabe a más que oro. Ha sido muy complicado llegar acá. El padecimiento que tengo es degenerativo y constantemente batallamos con muchas cosas. Estoy contenta y agradecida con el apoyo de México”, comentó, emocionada.
Gilda, quien se mostró motivada por seguir cosechando éxitos a nivel internacional, compartió el deseo de —mediante su ejemplo— crear conciencia sobre la esclerosis múltiple, enfermedad que le fue diagnosticada en 2020.
“La vida me sorprendió un día y ahora yo sorprendo a la vida. Me gustaría crear más consciencia sobre el padecimiento de la esclerosis múltiple y trabajar fuerte para Los Ángeles 2028”, dijo.
Lee también Medallistas mexicanos en París 2024 son inmortalizados en figuras de acción