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La emoción que distinguió a la última jornada de las eliminatorias mundialistas en la Concacaf y la Conmebol generó algunas jaquecas a los principales dirigentes de la Federación Internacional de Futbol (FIFA) , ya que flagrantes errores arbitrales y atentados al Fair Play provocaron situaciones no esperadas en varios duelos.
Lo más llamativo sucedió en el Panamá-Costa Rica. El árbitro guatemalteco Walter López concedió el primer tanto canalero (52’), pese a que la pelota nunca rebasó la línea de gol. Sin esa anotación, Honduras estaría clasificado, Estados Unidos en la repesca y los panameños, eliminados.
Sin embargo, los catrachos no protestarán ante la FIFA . Así lo aseguró el secretario de la Federación Nacional Autónoma de Futbol de Honduras , José Ernesto Mejía, quien indicó que “los errores de apreciación no son apelables”.
Pero ese no fue el único partido de la Concacaf que se vio manchado por los silbantes. El tercer gol de los hondureños, frente a la Selección Mexicana, estuvo precedido de un fuera de juego del atacante Romell Quioto . Si el salvadoreño Joel Aguilar lo hubiera invalidado, los catrachos estarían fuera y los estadounidenses disputarían la reclasificación con Australia.
“ Honduras iba con todo, independientemente de las circunstancias del futbol, donde —creo— que hubo dos goles que no debieron contar”, lamentó Decio de María , presidente de la FMF.
Y en Sudamérica , la polémica se desató por un video en el que se aprecia a Radamel Falcao García —goleador colombiano— charlar con varios jugadores peruanos, a quienes les pide bajar la intensidad durante los minutos finales. Con el 1-1, Colombia avanzó a Rusia 2018 y los incas a la reclasificación contra Nueva Zelanda.
“Nosotros estábamos enterados de lo que estaba pasando en los otros partidos. Estábamos jugando con los resultados y en ese momento [quise] hacer saber eso”, atinó a decir el Tigre, envuelto en polémica.
