Quince minutos en el futbol mexicano le bastaron al japonés Keisuke Honda, para anotar y festejar un gol.
El asiático entró al campo al minuto 57, y después de fallar un tanto cantado al rematar con la cabeza, a los 72’, tomó el balón fuera del área por la izquierda, para avanzar cinco metros y meter un disparo cruzado que venció a Melitón Hernández.
Fue el cuarto gol de los Tuzos en un día de campo que tuvieron, pues el Veracruz no fue rival, ni siquiera “llegó” al estadio.
Una aplanadora fue en la que se convirtió el equipo de Pachuca, arrasando desde el inicio del juego a los Tiburones, que fueron superados de principio a fin en lo futbolístico y también en la actitud, porque nunca se vio en la cancha un esfuerzo extra de los jarochos, que pasaron con más pena que gloria en este cotejo.
El marcador se abrió a los 13 minutos en una jugada de cuatro toques: De Erick Gutiérrez, quien desde media cancha filtró el balón a Erick Aguirre, quien de primera cedió a Ángelo Sagal, quien disparó a quemarropa sobre Gallese que rechazó en corto para que el chileno contrarrematara para marcar (1-0).
Fue el principio del fin. A pesar de que Aguirre se lesionó, Pachuca siguió funcionando como un reloj. Edson Puch sacó un rayo que dio en el larguero, el balón le quedó a Víctor Guzmán para anotar (31’). Y faltaba todavía más. El portero Gallese salió lesionado y entró Édgar Melitón Hernández sólo para recibir otros dos goles, el segundo de Guzmán (52’), lleva cuatro tantos en dos partidos y el de Honda que hizo valer los 3 millones de dólares que le pagan al mes.
Cristian Pellerano anotó el de la honra para los Tiburones Rojos de Veracruz (78’).
Pachuca de esta forma llegó a nueve puntos en el torneo, en tanto que la escuadra jarocha se quedó en sólo siete y muy cerca del fondo tabla de la porcentual.