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Los Patriots de Nueva Inglaterra vistieron de gala al Gillette Stadium para presumir sus cinco trofeos Vince Lombardi. En plena celebración, los Chiefs de Kansas City fueron los que armaron la fiesta.
Los campeones de la NFL inauguraron la campaña 2017 muy seguros de que su camino rumbo al Super Bowl LII sería fácil.
Los Pats sufrieron en su primer juego de la temporada. La derrota en su casa no estaba contemplada, mas Kansas City mostró su fortaleza defensiva y su velocidad ofensiva.
Lo que comenzó como una fiesta, terminó como funeral. Los Chiefs ganaron 42-27 a los pentacampeones de la NFL.
En la mano derecha de Tom Brady ya no hay espacio para un anillo más, pero el quarterback de 40 años, no está satisfecho y se aferra a un campeonato más. Sin embargo, anoche no fue el mismo que lideró la voltereta histórica en el Super Bowl LI. Es la primera vez que Nueva Inglaterra pierde el cotejo con ventaja en el último cuarto, en la era Brady. El quarterback tenía un récord de 105-0.
Para el inicio del duelo, los Patriots salieron constantes en la ofensiva. A Brady le bastó simplemente con la primera serie al ataque para hacer daño. Mike Gillislee hizo la primera anotación de la temporada 2017.
El ex corredor de los Bills de Buffalo sumó otro par de anotaciones, con un total de 45 yardas. El quarterback lanzó para 267 yardas, pero se fue sin touch-down y ninguna intercepción.
Los Chiefs, de la mano de Alex Smith, ajustaron y metieron en problemas a la defensiva local.
Tyreek Hill fue el objetivo favorito de Smith, con siete recepciones para 133 yardas y una anotación, pero para su mala suerte, salió lesionado, aparentemente, del tendón de Aquiles, en el último episodio.
Alex sumó 368 yardas y cuatro touchdowns. Tuvo el liderazgo necesario para darle tranquilidad al head coach, Andy Reid.
En la ceremonia previa al encuentro, el comisionado, Roger Goodell, fue abucheado por la fanaticada patriota.
