El campeón de la Fórmula Uno Max Verstappen fue castigado el viernes por decir groserías en la conferencia de prensa en donde argumentó en contra de restringir las groserías que dicen los pilotos.
Los comisarios de la FIA, el organismo rector del deporte motor, decidió que Verstappen deberá “cumplir trabajo de interés público”. Aún tendrán que llegar a un acuerdo para determinar de qué se trata.
Antes del Gran Premio de Singapur del domingo, Verstappen utilizó un insulto el jueves para describir la actuación de su auto en la calificación la semana pasada en el Gran Premio de Azerbaiyán.
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La decisión de los comisarios del viernes asegura que el piloto holandés les dijo que “la palabra es ordinaria en el vocabulario que aprendió, siendo que el inglés no es su lengua materna”. Los comisarios indicaron que Verstappen es un modelo a seguir y debe “estar atento cuando habla en foros públicos”.
En la misma conferencia, Verstappen se declaró en contra de “prohibir que los pilotos” digan groserías. Indicó que la pregunta de publicar los mensajes de radio de los pilotos durante las carreras cuando dicen grosería es para los socios de transmisión.
“En otros deportes no corren con un micrófono pegado a ellos. Creo que muchas personas dicen muchas cosas malas cuando están llenos de adrenalina en otros deportes, sólo que no lo saben”, indicó.
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La decisión se dio a conocer después de que el presidente de la FIA Mohammed Ben Suleyam criticó la cantidad de groserías y le dijo a motorsport.com que “tenemos que diferenciar entre nuestro deporte —el deporte motor— y la música rap”.
El siete veces campeón de la F1 Lewis Hamilton criticó a Ben Sulayem y dijo que usar el “estereotipo” de los raperos tuvo un “elemento racial”.