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Después de eliminar a los campeones actuales de la Liga MX y la Major League Soccer, de recorrer más de 10 mil kilómetros y sobreponerse a las condiciones de los distintos campos de juego (algunos con césped sintético), el Monterrey se mantiene como el único equipo mexicano vivo en la Leagues Cup y hoy, ante Nashville en el Geodis Park, va por el pase a la gran final, con la bandera tricolor como estandarte.
“La responsabilidad que cargamos al salir de Monterrey y enfrentar a toda la MLS es extra. Los jugadores entienden la situación, saben que hoy todo un país está detrás de Monterrey para pasar a la final”, declaró el director técnico de La Pandilla, Fernando Ortiz.
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Los Rayados, que están invictos en eliminaciones directas contra equipos de Estados Unidos en torneos internacionales, enfrentarán a un verdugo de la Liga MX, como lo es el Nashville, que a pesar de contar con tres años de existencia, dejó en el camino a históricos del futbol mexicano, como el América.
“Queremos seguir ganando. No importa la edad que tenga Nashville, dentro del campo de juego somos 11 contra 11. Creo que la única ventaja que puede tener Nashville es la localía”, señaló el Tano.
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El portero Esteban Andrada reconoció el deseo de jugar una hipotética final contra el astro Lionel Messi, aunque remarcó la seriedad con la que el Monterrey afrontó esta Leagues Cup.
“Es un torneo muy competitivo. Estamos en una situación privilegiada, después de mucho esfuerzo, y queremos lograr el objetivo, que es jugar otra final. Es una competencia que se ve en todo el mundo y sobre todo por la llegada de Messi a Miami, y hay que aprovechar para estar a la altura”, confesó el guardameta argentino, quien ha sido pieza clave de los regiomontanos.
