Se vienen cambios en el futbol mexicano. La inminente entrada de un fondo de inversión vendrá a potenciar la economía de los clubes de la Liga MX, pero de igual forma, obligará a cambiar viejas prácticas, como lo son la multipropiedad.
En México, el Grupo Pachuca ―propiedad de Jesús Martínez― tiene dos equipos: los Tuzos al mando de Armando Martínez y el León, presidido por Jesús Martínez hijo.
Y en 36 meses, el Grupo debe vender uno de los dos equipos. Los Tuzos, su insignia, no será; así que el León es el que está condenado y Martínez hijo está consciente de esto.
León será vendido, quizá no todo, pero sí un porcentaje de este: “Quiero ser muy claro con la gente, está claro que tenemos 36 meses para tomar una decisión de vender un porcentaje del equipo. Lo haremos, pero no nos vamos, seguiremos operando. Quiero dar este mensaje de certeza, aquí estaremos”, dijo el directivo en rueda de prensa.
Aceptó que vienen cambios importantes en el futbol mexicano, “más aún si son por el bien de todos. Ahora nos tocará tomar decisiones, pero queremos seguir creciendo lo que hemos hecho en estos años”.
El León es uno de los clubes históricos del futbol mexicano. Fundado en 1943, cuenta con ocho títulos de Liga y uno de la Concacaf.
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El Grupo Pachuca no es el único que opera siendo propietario de varios equipos en México.
El anuncio de Martínez quiere decir que, los grupos empresariales que tienen el control de varios equipos en la Liga MX, tienen tres años para vender.
Los Gallos Blancos de Querétaro y los Xolos de Tijuana son propiedad de la familia Hank. Desde hace más de dos años se ha tratado de vender al equipo queretano, pero no ha existido el comprador que en primer lugar, cobra el costo y también cumpla con los requisitos que pide la FMF.
Presidido por el polémico Alejandro Irarragorri, el Grupo es propiedad de Santos Laguna y tiene el control accionario de Atlas.