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El primer tiempo del Clásico Tapatío quedó marcado por el penalti que falló el Pocho Guzmán y el gol de Julián Quiñones, pero sobre todo por dos polémicas decisiones arbitrales que parecieran ayudaron al Guadalajara y perjudicaron al Atlas.
En la primera mitad en el Estadio Jalisco se vivieron dos jugadas dentro del área de Miguel Jiménez que han puesto al Gato Ortiz en el ojo del huracán.
Iban apenas 10 minutos del encuentro cuando en una acción que tuvo que ser marcada como penalti y que fue omitida por los silbantes, se vio al Tiba Sepúlveda querer pegarle al balón con el pie derecho. En ese instante se cruzó Julio Furch, quien cayó al césped dentro del área grande en la zona defendida por el Wacho. Y nada, el juego siguió.
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La segunda polémica se presentó a los 15 minutos, con una barrida de Jesús Chiquete dentro del área. Pareciera que se llevaba a Ozziel Herrera, aunque en los videos con la toma más cercana se aprecia que ambos futbolistas cayeron sin un contacto propiciado con intención por parte del rojiblanco.
Ninguna de las dos jugadas mencionadas fue marcada y esto prendió los ánimos tanto en el estadio como en las redes, pues en el Coloso de la Calzada Independencia los reclamos desde la tribuna llegaron de inmediato y en las redes los fanáticos han comenzado a reventar al central y al Guadalajara por "recibir ayudas" en este juego de ida.
