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Lo dijo en la semana el capitán de Cruz Azul, Juan Escobar: “Ya no hay margen de error” y eso es muy cierto, pues si la Máquina quiere aspirar a las finales del Apertura 2023, tiene que vencer a los Gallos Blancos de Querétaro.
Aunque la historia futbolística hable de la obligación cementera para vencer a los queretanos, la realidad es que el presente señala que el juego está parejo y no se puede señalar a un favorito más allá de que el juego se disputará en la cancha del Estadio Azteca.
Cruz Azul se encuentra en el lugar 16 de la tabla con 5 puntos, producto de una victoria, dos empates y cinco derrotas. No muy lejos de la angustia celeste, están los Gallos en el lugar catorce con sólo ocho unidades, gracias dos victorias, dos empates y cuatro derrotas, la última muy polémica frente a las Águilas del América a media semana.
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La buena noticia para Cruz Azul es que al fin entrenó con equipo completo, todo su plantel está listo y a la disposición del técnico Joaquín Moreno, para que este elija el once que más le convenga en estos momentos.
La duda está en la portería, ya que después de los errores de Sebastián Jurado y Andrés Gudilño, el técnico deberá de decidir si los sigue rotando. El plan original manda que Gudiño pare ante los queretanos, pero en el pasado encuentro en contra del Mazatlán, el portero yucateco dejó qué desear.
Adelante se espera la presencia de Diber Cambindo, quien pasó de ser el jugador más criticado de los cementeros, a ser el nuevo héroe con sus goles oportunos, que lo colocan entre los mejores artilleros del torneo actual.
