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Las Chivas de Fernando Gago empiezan a mostrar señales de que serán un equipo protagonista en el plano nacional e internacional.
Con una racha de cuatro partidos sin conocer la derrota, tres de ellos con triunfos consecutivos, el Guadalajara recibe en el estadio Akron a los Bravos de Juárez, que viven una realidad completamente distinta, además de que no suelen pasarla bien en Jalisco.
Mientras Chivas apunta a un nuevo triunfo que le acerque a los primeros lugares, Juárez ocupa el penúltimo escalón de la tabla de posiciones y aún no conoce la victoria en el torneo Clausura 2024; de hecho, arrastra una racha de dos derrotas al hilo en sus últimos tres compromisos.
Al gran presente de los rojiblancos se le añade la fortaleza que representa el estadio Akron. En la presente campaña no han perdido en condición de local, llevan un empate y una victoria.
Por el otro lado, el equipo de la frontera, que tendrá el debut del brasileño Mauricio Barbieri en el banquillo como director técnico, cayó en sus dos partidos fuera de casa.
Todo parece funcionar en el Rebaño, que entre semana festejó en la Concachampions gracias a los primeros goles de Cade Cowell como rojiblanco, y contra un rival que actualmente parece más inofensivo que “bravo” busca alargar el historial de enfrentamientos directos contra los juarenses a su favor, que es de cinco victorias, tres empates y solamente una derrota. La misión supone ser accesible, ya que, si bien Chivas no vence a Juárez en casa desde 2020 y la única vez que tropezó frente a ellos fue en suelo tapatío, Gago podrá contar con Roberto Alvarado, Gilberto Orozco Chiquete, Erick Gutiérrez y Víctor Guzmán, elementos que descansaron entre semana en el triunfo sobre el Forge FC y que están listos para retomar la actividad, caso similar al de José Juan Macías, quien regresaría a jugar después de casi dos semanas.
