Volvió a pasar... Sergio Pérez tuvo un terrible arranque en las pruebas del Gran Premio de Hungría al chocar y estrellar su monoplaza contra un muro a los tres minutos de la P1.
Al final de la curva cuatro del Circuito de Hungaroring, Checo "perdió el control" del RB19 y terminó estrellándose contra el muro de contención.
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"He tocado la hierba en frenada y perdí el control" dijo el piloto tapatío en la radio del equipo.
Lógicamente, el accidente del coequipero de Red Bull provocó bandera roja y todos los pilotos volvieron a pits.
Afortunadamente, a Checo no le pasó nada, aunque su RB19 si salió afectado, en especial por el costado izquierdo, donde impactó contra el muro.
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